Autor/autores:
Espen M. Eilertsen, Rosa Cheesman, Ziada Ayorech...(et.al)
Los modelos teóricos del desarrollo de los trastornos de externalización infantil enfatizan el papel de los padres. Los estudios empíricos no han podido identificar aspectos específicos de los comportamientos de los padres que expliquen una proporción considerable de las diferencias individuales observadas en los problemas de externalización. El problema ...
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Los modelos teóricos del desarrollo de los trastornos de externalización infantil enfatizan el papel de los padres. Los estudios empíricos no han podido identificar aspectos específicos de los comportamientos de los padres que expliquen una proporción considerable de las diferencias individuales observadas en los problemas de externalización.
El problema se complica por la contribución de los factores genéticos a los problemas de externalización, ya que los padres proporcionan genes y ambientes a sus hijos. Estudiamos las contribuciones conjuntas de los efectos genéticos directos de los niños y los efectos genéticos indirectos de los padres a través del entorno sobre los problemas de externalización.
El estudio utilizó datos de polimorfismo de un solo nucleótido de todo el genoma de 9. 675 tríos de padres e hijos que participaron en el estudio de cohorte noruego de madre, padre e hijo. Sobre la base de matrices de relación genómica, estimamos la contribución de los efectos genéticos directos y los efectos genéticos maternos y paternos indirectos sobre el TDAH, la conducta y los comportamientos disruptivos a los 8 años de edad.
Se prefirieron los modelos que incluían efectos genéticos parentales indirectos para los síntomas del TDAH de falta de atención e hiperactividad y problemas de conducta, pero no para los comportamientos desafiantes de oposición.
Los efectos genéticos directos representaron del 11 % al 24 % de la varianza, mientras que los efectos genéticos parentales indirectos representaron del 0 % al 16 % en los síntomas del TDAH y los problemas de conducta. La correlación entre efectos genéticos directos e indirectos, o correlaciones gen-ambiente, disminuyó la varianza en un 16% y 13% para problemas de conducta e inatención, y aumentó la varianza en un 6% para problemas de hiperactividad.
Este estudio brinda apoyo empírico a la noción de que los padres tienen un papel importante en el desarrollo de conductas externalizantes infantiles.
La contribución de los padres a la disminución de la variación de la falta de atención y los problemas de conducta mediante las correlaciones gen-ambiente limitaría el número de niños que alcanzan rangos clínicos en los síntomas.
No tener en cuenta los efectos genéticos parentales indirectos puede conducir a un sesgo tanto positivo como negativo al identificar variantes genéticas para comportamientos de externalización infantil.
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