Alteraciones Hormonales en adictos a Opiáceos y regulación tras la abstinencia con el el uso de naltrexona.

Año Académico: 2001
Universidad: ALCALÁ
Centro de Lectura: MEDICINA
Departamento: ESPECIALIDADES MÉDICAS
Programa Doctorado: ESPECIALIDADES MÉDICAS
Centro de Realización: FACULTAD DE MEDICINA
Director: SAÍZ RUIZ JERÓNIMO
Codirector: OCHOA MANGADO ENRIQUETA
Tribunal: CASAS BRUGUÉ MIGUEL
AMBROSIO FLORES EMILIO
CHINCHILLA MORENO ALFONSO
CABRERA FORNEIRO JOSÉ
CRESPO HERVÁS M. DOLORES

Descriptores: PSIQUIATRIA; ENDOCRINOLOGIA; EFECTO DE LAS DROGAS; CIENCIAS MEDICAS; MEDICINA INTERNA; PSICOFARMACOLOGIA; PSICOLOGIA;
Resumen: OBJETIVOS Comprobar si el uso crónico de opiáceos produce alteraciones endocrinas en varones adictos, y, si esto es así, si estas alteraciones revierten tras la abstiencia a corto y medio plazo mediante el tratamiento con naltrexona, así como averiguar la influencia de este antagonista en el proceso. MÉTODO Se miden las hormonas FSH, LH, testosterona, PRL, ACTH y cortisol en 44 varones con dependencia de opiáceos según criterios CIE-10 y DSM-IV, que se desintoxicaron entre enero de 1998 y septiembre de 2000 para continuar la deshabituación con naltrexona en el Hospital Ramón y Cajal de Madrid (30 de forma "clásica" en ambulatorio y planta de psiquiatría y 14 mediante desintoxiación "ultrarrápida" en UVI). Las muestras se obtienen cuando acuden por primera vez a consulta intoxicados (tl), tras la desintoxicación (t2), dos horas después de la primera ingesta de naltrexona (t3) y al mes de la abstinencia (t4). Los resultados se comparan con los de un grupo contro de 34 varones sanos emparejados por edad con los pacientes, cuyos valores hormonales nos ofrecen los valores basales y el efecto de la naltrexona en estos sujetos. RESULTADOS El consumo crónico de opiáceos eleva los niveles hormonales de los sujetos en el caso de LH, PRL y ACTH; mientras que los disminuye en el caso de la testosterona. Tras la abstinencia aguda, se observa un aumento generalizado, estadísticamente significativo, de todos los niveles hormonales analizados (excepto prolactina). Estos incrementos hormonales se producen de forma brusca (a las 24 horas de abstinencia en los pacientes de UVI) respecto a la ACTH, FSH, cortisol y testosterona, y de un modo más sostenido para la LH, que sigue aumentando hasta la desintoxicación completa. La PRL aumenta en el grupo de UVI y desciende en el grupo de ambulatorio y planta. En el análisis estadístico del grupo control no aparecieron diferencias significativas entre las muestras sanguíneas tomadas antes y después de la administración de la naltrexona, lo que implica que la naltrexona no provoca por si sola cambios significativos en los niveles hormonales. Tras el primer mes de abstinencia, no hay variaciones estadísticamente significativas, excepto un descenso del cortisol, aunque la pérdida de muestra hace que estos resultados no sean concluyentes. En nuestra muestra la naltrexona ha sido bien tolerada, ningún pacientes abandonó el tratamiento por reacciones adversas, y los efectos secundarios fueron escasos, consistiendo principalmente en molestias gástricas (en el 20% de la muestra). Nadie suspendió el tratamiento por ello. Es de reseñar que ningún control presentó efecto secundario alguno con una dosis única de 50 mg de naltrexona.