Manía e hipomanía farmacógena.

El síndrome maníaco se asocia, principalmente, con el trastorno bipolar. Sin embargo, se han descrito, con cierta frecuencia, episodios maníacos asociados a enfermedades somáticas o al uso de determinadas sustancias. En este sentido, lesiones cerebrales focales (de origen vascular, traumático o tumoral) y no focales (esclerosis múltiple, epilepsia), infecciones, alteraciones metabólicas, determinados tóxicos y algunos tratamientos se han considerado inductores de episodios maníacos(1-5). La presencia de una posible causa del episodio maníaco delimita el concepto de «manía secundaria»(4) o de trastorno del estado de ánimo, con síntomas maníacos, debido a una causa médica o inducido por sustancias(6).

Esta revisión se centrará en el fenómeno de inducción de manías e hipomanías por sustancias utilizadas como tratamiento de algún proceso mórbido. En primer lugar abordaremos la inducción farmacológica de manías desde una perspectiva global y en segundo lugar particularizaremos el estudio de este fenómeno en el uso de fármacos antidepresivos.



Para acceder al texto completo es necesario suscribirse en la revista http://www.grupoaulamedica.com/web/archivos_rojo/revistas1.cfm?idPublicacion=29