Partiendo de un muestra de 291 niños, se pretende mostrar cómo la ansiedad, la autoestima negativa y el sueño interaccionan favoreciendo el sobrepeso infantil.
De la muestra analizada se obtuvo su índice de masa corporal (IMC) y se les aplicó varias pruebas diagnósticas que analizaban el nivel de ansiedad y la autoestima.
Se observó que la media de sueño diaria fue inferior a las 10 u 11 h recomendadas para su edad. Además se comprobó que determinados estados emocionales pueden favorecer el incremento del IMC en los niños, y que dicho incremento estaría relacionado con la reducción de horas de sueño asociada a esos estados emocionales.
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