Autor/autores:
Megan Zacher ,Mónica Arkin ,Jean Rodas ...(et.al)
Los desastres naturales tienen un impacto adverso en la salud mental de los niños, con una mayor exposición de los padres o los niños y la subsiguiente angustia de los padres que predice peores resultados. Sin embargo, aún se desconoce si las consecuencias psicológicas de los desastres para los niños persisten a largo plazo y, de ser así, por qu&eac...
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Los desastres naturales tienen un impacto adverso en la salud mental de los niños, con una mayor exposición de los padres o los niños y la subsiguiente angustia de los padres que predice peores resultados. Sin embargo, aún se desconoce si las consecuencias psicológicas de los desastres para los niños persisten a largo plazo y, de ser así, por qué y para quién.
Por lo tanto, examinamos los efectos de la exposición de las madres al huracán Katrina en la salud mental de los niños adolescentes 12 años después, distinguiendo entre los efectos directos de la exposición al desastre y los efectos mediados por la angustia materna, y evaluando la moderación por edad y sexo del niño.
Los datos procedían de un estudio de 2003 a 2018 de madres jóvenes, de bajos ingresos, principalmente afroamericanas, que vivían en Nueva Orleans cuando ocurrió el huracán Katrina en 2005 (n = 328). Las madres calificaron su salud mental aproximadamente un año antes de Katrina y uno, cuatro y 12 años después. Informaron sobre los síntomas de internalización y externalización de un niño adolescente (de 10 a 17 años, media = 14, 46) 12 años después de Katrina utilizando el cuestionario de fortalezas y dificultades.
Los modelos analíticos de trayectoria que se ajustaron a la angustia de las madres antes del desastre mostraron que, mientras quelos efectos directos de la exposición materna a huracanes en la salud mental infantil no fueron significativos, los efectos indirectos sí lo fueron. Específicamente, las madres que experimentaron más factores estresantes relacionados con Katrina experimentaron una mayor angustia a partir de entonces, lo que predijo peores resultados para los niños.
Los resultados no difirieron significativamente según la edad del niño. Se discuten las diferencias de género.
Los hallazgos sugieren que los desastres pueden afectar la salud mental de los niños durante muchos años, incluso para aquellos que eran muy pequeños o aún no habían nacido en ese momento, debido a la angustia de los padres relacionada con el desastre.
Abordar las necesidades de salud mental de los padres después de los desastres puede mejorar el bienestar de los niños a largo plazo.
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