MADRID, 20 Mar. (EUROPA PRESS) -
El consumo excesivo de alcohol puede favorecer la aparición de más de 60 enfermedades como, por ejemplo, hepatológicas, pancreatitis, neuropatías, discrasias sanguíneas, patologías digestivas, impotencia sexual o, aquellas que guardan correlación con algunos cánceres como el de mama en mujeres, el carcinoma hepático y pancreático y el de laringe cuando hay un uso concomitante de tabaco.
Así lo han asegurado este jueves los responsables de la organización Socidrogalcohol, con motivo de la presentación de la nueva 'Guía Clínica de Alcoholismo', un manual dirigido a los profesionales sanitarios para facilitar y promover la labor de prevención de este consumo, y que ha contado con el apoyo de diferentes sociedades científicas como, por ejemplo, la Sociedad Española de Patología Dual (SEPD) y la Sociedad Española de Psiquiatría (SEP).
Y es que, la ingesta de alcohol, especialmente entre los más jóvenes, se ha convertido actualmente en uno de los principales problemas sanitarios y sociales. De hecho, la última Encuesta Escolar sobre Uso de Drogas en Estudiantes de Enseñanzas Secundarias (ESTUDES) 2012-2013 ha mostrado un aumento de hasta el 81,9 por ciento en el número de estudiantes de entre 14 y 18 años que ha consumido esta sustancia en el último año y hasta el 74 por ciento en el último mes.
Sin embargo, los datos que más preocupan a los expertos son los relativos a los llamados "atracones" --5 o más copas en un corto espacio de tiempo-- ya que, según ha revelado dicho estudio, el 20 por ciento de los estudiantes de 14 años, y el 51 por ciento de los de 16 años, reconocen haberse "atracado" alguna vez en el último mes.
Asimismo, un reciente estudio de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Comisión Europea ha situado a España en una posición ligeramente superior a la media del resto de países de Europa en cuanto a consumo de litros de alcohol por persona al año, siendo de 13,7 litros en nuestro país y de 13 litros en el resto.
Además, se estima que el 5 por ciento de los hombres europeos tienen dependencia al alcohol, un porcentaje que, según ha informado el jefe de servicio del área de Psiquiatría de la Unidad Asistencial de Drogodependencias de A Coruña y miembro de Socidrogalcohol, César Pereiro, podría ser del 10 por ciento en el caso de los españoles.
Se trata, por tanto, de unas cifras "muy alarmantes" y más teniendo en cuenta que esta sustancia está presente en el 90 por ciento de los policonsumos y que, al mismo tiempo, el 44 por ciento de los pacientes admitidos a tratamiento por un consumo excesivo de alcohol padecen, como mínimo, otro trastorno mental y, alternativamente, al menos el 34 por ciento de las personas con estos trastornos tienen problemas derivados con el consumo excesivo de bebidas alcohólicas.
"El cerebro no termina de madurar hasta los 22 o 24 años, por lo que cualquier acción que sea neurotóxica va a interrumpir en el desarrollo neuronal y, por desgracia, esta pérdida es irreversible. Nosotros somos psiquiatras y es difícil no ver a un paciente con trastorno mental que no consuma alcohol y otras drogas", ha comentado el presidente de Socidrogalcohol y catedrático de Psiquiatría de la Universidad de Oviedo-CIBERSAM, Julio Bobes.
EL PELIGRO DEL ESTRÉS INTENSIVO CONTINUADO
En este sentido, el vicepresidente de la organización y miembro de la Unidad de Conductas Adictivas del Hospital de la Santa Creu i Sant Pau de Barcelona, Josep Guardia, ha avisado de que "nadie" sabe de antemano si puede padecer alcoholismo aunque, no obstante, existen diferentes factores individuales y ambientales que favorecen la aparición de esta enfermedad.
Concretamente, los factores genéticos, trastornos mentales y de personalidad, los factores neurocognitivos, neurobiológicos y el inicio precoz de abuso de alcohol pueden predisponer a un individuo a sufrir dependencia a esta sustancia, al igual que los socioculturales, familiares, sociodemográficos, la legislación, la accesibilidad a la sustancia, la baja percepción del riesgo o los amigos.
Ahora bien, el experto ha avisado de que uno de los principales factores de riesgo es el estrés intensivo continuado ya que, en muchas ocasiones, sitúa a la persona en una posición de vulnerabilidad que favorece el consumo abusivo de alcohol.
Del mismo modo, prosigue, existen factores que pueden proteger a la hora de tener problemas de dependencia a esta sustancia como, por ejemplo, los ambientes familiares protegidos, el apoyo y cariño de los padres en la infancia y los espacios libres de bebidas alcohólicas.
"Las experiencias infantiles precoces adversas marcan a las personas, las cuales van a crecer con una mayor vulnerabilidad a padecer estrés y a que cuando sean adultos y les ocurra alguna catástrofe individual o colectiva sean más propensos a tener este tipo de conductas adictivas", ha apostillado Guardia.
ALCOHOLISMO: ENFERMEDAD ADICTIVA CON MEJOR RESPUESTA A LA TERAPIA
Pese a todo ello, los expertos han asegurado que el alcoholismo es, entre todas las patologías adictivas, la que tiene una "mejor respuesta" al tratamiento, aunque, según han lamentado, la "gran mayoría" de estos pacientes no han seguido un tratamiento especializado cuyo objetivo principal son las recaídas.
"Actualmente hay fármacos muy eficaces que protegen frente a las recaídas", ha aseverado Guardia. Una afirmación que ha sido corroborada por Bobes quien ha lamentado las "inequidades" que actualmente se están produciendo en el acceso a los tratamientos y a los procesos terapéuticos de esta enfermedad.
Por su parte, el coordinador de la Unidad de Conductas Adictivas de Alcoi (Alicante) y miembro de la Junta Directiva de Socidrogalcohol, Francisco Pascual, ha recordado que las principales medidas que han demostrado ser coste-efectivas, tanto en el tratamiento del alcoholismo como en su prevención, son la detección precoz y la intervención breve y temprana.
Antiguamente, los modelos de enfoques terapéuticos estaban dirigidos a los pacientes adictos al alcohol más graves y, por ende, a su abstinencia total. Sin embargo, los expertos que han participado en la elaboración de la guía han destacado la necesidad de que el abordaje de esta problemática incluya también a los enfermos menos graves con el fin de aminorar el daño antes de llegar a situaciones extremas.
"Estamos utilizando una cantidad importante de dinero para tratar esta adicción cuando la podríamos ahorrar si se llevaran a cabo políticas de prevención efectivas y reales", ha recalcado Pascual, para zanjar subrayado la necesidad de modificar la legislación con el fin de limitar la disponibilidad y la accesibilidad al consumo de alcohol.