Aunque el correcto diagnóstico y manejo de los pacientes con esquizofrenia y un diagnóstico comórbido de trastorno por uso de sustancias (TUS) determinaría una disminución de la morbilidad y mortalidad en estos pacientes, el desarrollo de estrategias terapéuticas eficientes es todavía una asignatura pendiente.
Presentamos recomendaciones sobre el manejo farmacológico y psicológico de estos pacientes siguiendo la estructura PICO (Paciente-Intervención-Comparación-Outcome/resultados). Realizamos una evaluación de la calidad de los estudios y un resumen de la evidencia para cada pregunta siguiendo las recomendaciones del grupo de trabajo GRADE («Grading of Recommendations, Assessment, Development and Evaluation»).
Nuestros resultados sugieren:
1) En pacientes con esquizofrenia y trastorno por consumo de cannabis, no es posible recomendar un fármaco antipsicótico sobre otro (entre olanzapina, risperidona o haloperidol) para mejorar los síntomas psicóticos, reducir el consumo de cannabis o mejorar las variables pragmáticas (recomendación débil). No se puede recomendar la clozapina para reducir el consumo de cannabis (recomendación débil).