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Los problemas sexuales han estado con el hombre desde el principio mismo de la humanidad. Sin embargo el nacimiento de la sexología se remonta a principios del presente siglo. Cabe destacar el nombre de pioneros tales como Freud, Kraft-Ebin, Kinsey, Masters y Johnson, y Helen Kaplan, entre otros. El tratamiento exitoso de una disfunción sexual va a depender de un buen diagnóstico, donde se contemplen los elementos orgánicos, los psicológicos y los de la personalidad. De igual manera debe contemplarse la educación sexual en la tríada padres, escuela y medios de comunicación. De igual manera es necesario mejorar las investigaciones relacionadas con la química de la atracción, la neuropsicoinmunología, la salud sexual y la calidad de vida. El mejoramiento de la salud sexual de los individuos va a depender de un control efectivo de la ansiedad, la cual se puede manejar por medio de la relajación. La psicoterapia introduce un elemento valioso en el manejo de aquellos que solicitan ayuda, ya que es un proceso para el trabajo de situaciones conflictivas, a nivel individual o en la relación de pareja. La farmacoterapia es otro elemento a tomar en cuenta en el caso de los antidepresivos, hipotensores y las drogas vasoactivas. Estas últimas han creado una revolución en lo que a la respuesta sexual del hombre se refiere. En este momento se avanza en la búsqueda de respuestas similares en las mujeres. La terapia sexual entró en una verdadera revolución con los trabajos de Masters y Johnson, quienes desarrollaron métodos verdaderamente efectivos para el manejo de las disfunciones sexuales. Estos trabajos han sido enriquecidos por otros autores, por lo que podemos decir que quienes lo deseen pueden mejorar su vida sexual.