Los resultados encontrados a partir de una extensa revisión bibliográfica -que incluye la consulta de artículos científicos y manuales de autores clásicos de referencia en este campo-, indican que una de cada cinco mujeres embarazadas presenta alguna alteración psíquica en la etapa perinatal, encontrando los índices más elevados en aquellos trastornos relacionados con la ansiedad y la depresión.
El padecimiento de algún trastorno mental constituye un factor de riesgo para la construcción de un vínculo saludable madre-bebé, lo cual puede favorecer la aparición de dificultades en el desarrollo psicológico del niño a corto, medio y largo plazo. El objetivo último de este trabajo es proponer la inclusión de programas de prevención y de intervención en salud mental en este periodo de la vida, tanto para el tratamiento del malestar emocional encontrado en las mujeres, como para la prevención de la aparición de alteraciones emocionales y conductuales en sus hijos en el futuro. Se propone un protocolo de intervención psicológica grupal para mujeres embarazadas desde una perspectiva de género.
Dicho programa incluye 12 sesiones de 1 hora y media de duración cada una. El objetivo se centra en favorecer la adaptación de la mujer y la inclusión de un nuevo rol como madre, abordando las dificutaldes emocionales que puedan aparecer. Se propone la derivación a intervención individual en aquellos casos en los que se aprecie psicopatología de gravedad que precise de un abordaje intensivo.