La asertividad es una parte de las habilidades sociales referida a la actitud de autoafirmación y defensa de los propios derechos, que incluye la expresión de sentimientos u opiniones, en forma adecuada, respetando los derechos de los demás. El déficit de habilidades sociales y asertividad se relaciona con aspectos como la ansiedad o la baja autoestima, y su entrenamiento puede resultar muy importante como parte de la psicoterapia en diferentes trastornos psicológicos en cuanto que facilita la comunicación con los otros, la resolución de problemas interpersonales, aumenta la autonomía y la autoestima y favorece las emociones positivas y el bienestar en general. No obstante, en el ámbito de la salud mental no existen muchos estudios en España que presenten resultados de eficacia y eficiencia del entrenamiento en asertividad en muestras clínicas.