La Estimulación Magnética Transcraneal (EMT) es una técnica no invasiva que comenzó a utilizarse hace más de veinte años y ha demostrado su eficacia (por ahora parcial) en el tratamiento de algunas enfermedades neuropsiquiátricas, como por ejemplo la depresión resistente o la migraña
En los últimos años están apareciendo numerosos trabajos de investigación en los que se postula que puede ser un tratamiento eficaz en otras enfermedades como el trastorno de estrés postraumático, trastorno obsesivo-compulsivo y en otras patologías no psiquiátricas.