La impulsividad aparece definida en diferentes diccionarios de Salud Mental como una acción rápida sin pensamiento o juicio consciente previo, como un comportamiento sin adecuado pensamiento o como una tendencia al «paso al acto» con menor reflexión previa que la mayoría de individuos con los mismos conocimientos o habilidades. Es dimensión psicopatológica en múltiples trastornos, característicamente alterada en los llamados trastornos del control de los impulsos aunque también síntoma clave para la comprensión de otros trastornos mentales como trastornos de personalidad del cluster B, abuso de sustancias o suicidio.