Debido al COVID-19, el pasado 14 de marzo, se declara el Estado de Alarma en España y se declara la situación de Pandemia. Desde los primeros momentos de esta crisis sanitaria, los psicólogos y psicólogas de emergencias comienzan a detectar y a atender las necesidades psicológicas de la población en este periodo de impacto, de incertidumbre provocado por el Covid-19. Es por ello que se hace necesaria la creación de un recurso específico para atender psicológicamente a la población así como a las personas intervinientes.
Es por ello que surgen diferentes recursos de atención psicológica, y la intervención psicológica telefónica se plantea como un recurso seguro, accesible y especializado siendo atendido por psicólogos y psicólogas expertos/as en emergencias. El trabajo realizado ha supuesto un reto desde el principio, dónde los psicólogos y psicólogas se han ido adaptando constantemente a las necesidades del momento y elaborando al mismo tiempo protocolos concretos para cada necesidad que emergía.
La atención telefónica psicológica, en este caso además es intervención en crisis, es una intervención preventiva cuyo fin es atender la salud mental y contribuir a no patologizar las reacciones normales ante este tipo de situaciones de crisis. Se plantea como un recurso preventivo, con objetivos como: reducir el nivel de ansiedad, ayudar a realizar una gestión emocional adecuada en esta situación, facilitar información ajustada y veraz, y provenir y/o reducir el grado de intensidad y el nivel de afectación en la población y los y las profesionales…entre otros.