Durante la crisis de la enfermedad por coronavirus (COVID-19), las tecnologías digitales se han convertido en una ruta importante para acceder a la atención remota. Por lo tanto, la necesidad de garantizar que estas herramientas sean seguras y efectivas nunca ha sido mayor.
Planteamos cinco llamados a la acción para garantizar la seguridad, disponibilidad y sostenibilidad a largo plazo de estas tecnologías: diligencia debida: eliminar aplicaciones de salud dañinas de las tiendas de aplicaciones; información valiosa: utilice información relevante de datos de salud de herramientas digitales de alta calidad para informar la mayor respuesta a COVID-19; recursos disponibles gratuitamente: poner a disposición herramientas de salud digital de alta calidad sin cargo, siempre que sea posible y durante el mayor tiempo posible, especialmente para aquellos que son más vulnerables; transición digital: transformar los servicios convencionales de salud mental fuera de línea para que estén disponibles digitalmente; y autogestión de la población: alentar a los gobiernos y las aseguradoras a trabajar con los desarrolladores para ver cómo la gestión de la salud digital podría ser subsidiada o financiada.
Creemos que esto debe llevarse a cabo a nivel de la población, en lugar de a nivel de prescripción.
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