Resumen
La depresión y el trastorno límite de la personalidad (TLP) se creen ir acompañados de alteraciones en la experiencia subjetiva sobre recompensas ambientales. Se evaluaron las respuestas de las mujeres a sabores dulces, amargos y neutros (jugo, quinina y agua): 29 con depresión, 17 con TLP y 27 controles sanos. El grupo con TLP mostró menor agrado y mayores calificaciones en asco por la quinina y el zumo en comparación con el grupo control; el grupo con depresión no difirió significativamente del grupo control. Las calificaciones de asco al zumo estuvieron relacionadas con autodesagrado en el TLP, lo que sugiere una relación estrecha entre el procesamiento sensorial anormal y la propia identidad en el TLP.
El disfrute reducido en experiencias agradables y el aumento del impacto de las emociones negativas se observaron clínicamente en la depresión y en el trastorno límite de la personalidad (TLP). Sorprendentemente, los estudios previos de laboratorio no apoyan una relación entre la depresión y la reducción de calificaciones de agradabilidad a recompensas biológicas, tales como soluciones de sacarosa (por ejemplo, véase Swiecicki et al.). Sin embargo, los pacientes con depresión podrían ser más sensibles a inputs primarios negativos. Pocos estudios han utilizado estímulos aversivos en la evaluación del sabor de la depresión y ningún estudio ha sido llevado a cabo para evaluar las calificaciones hedónicas de gustos en el TLP, a pesar del clínicamente observable procesamiento emocional aberrante y del aumento de estado y rasgo del asco. Tenemos la hipótesis de que los pacientes con TLP y depresión podrían diferir de los controles sanos en sus calificaciones de agrado y asco a los estímulos del gusto positivos y, especialmente, a los negativos.
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