Antecedentes
Los problemas de conducta en la infancia son altamente prevalentes y tienen un impacto significativo en la salud y la sociedad. Sin embargo, existen limitaciones en la comprensión de las diferencias de género en sus características, factores determinantes e implicaciones a largo plazo.
Este estudio longitudinal de tres años exploró las distintas co...
Antecedentes
Los problemas de conducta en la infancia son altamente prevalentes y tienen un impacto significativo en la salud y la sociedad. Sin embargo, existen limitaciones en la comprensión de las diferencias de género en sus características, factores determinantes e implicaciones a largo plazo.
Este estudio longitudinal de tres años exploró las distintas configuraciones de rasgos individuales en niños con problemas de conducta, evaluando si:
1) los mismos perfiles de rasgos pueden identificarse tanto en niños como en niñas, y
2) los predictores y resultados asociados con estos perfiles son los mismos entre géneros.
Método
Se llevó a cabo un análisis de perfiles latentes multigrupo basado en rasgos temperamentales y psicopáticos en una muestra de 401 niños pequeños (50. 87% niñas) que presentaban puntuaciones altas en problemas de conducta. Este enfoque permitió identificar configuraciones específicas de rasgos individuales y examinar si existen diferencias significativas entre niños y niñas en cuanto al número de perfiles, las características de estos perfiles, sus predictores y sus resultados.
Resultados
Los resultados mostraron que tanto el número de perfiles identificados como las medias y varianzas de las variables que componían los perfiles fueron similares entre géneros, lo que sugiere que existen constelaciones de rasgos comparables en niños y niñas con problemas de conducta.
Se identificaron cuatro perfiles distintos, y las niñas se encontraban con mayor frecuencia en el grupo menos problemático, lo que indica diferencias en la distribución de los perfiles entre géneros. Aunque los predictores de los perfiles, tales como rasgos temperamentales y psicopáticos, fueron invariantes entre géneros, los resultados de estos perfiles mostraron diferencias.
Esto implica que, aunque las características individuales pueden predecir problemas de conducta de manera similar en niños y niñas, las consecuencias a largo plazo de estos problemas pueden variar según el género.
Conclusiones
Este estudio aporta una contribución significativa a la comprensión de la heterogeneidad en los problemas de conducta, al identificar constelaciones específicas de rasgos tanto en niños como en niñas. Los hallazgos demuestran la importancia de considerar el género al analizar la evolución y las implicaciones de los problemas de conducta en la infancia.
La identificación de diferencias en los resultados según el género destaca la necesidad de desarrollar intervenciones que se adapten a las particularidades de niños y niñas, con el objetivo de abordar eficazmente las consecuencias de los problemas de conducta a largo plazo.
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