Autor/autores:
Ding Hao Yu Zhang ,Ying Ying Xie...(et.al)
La alteración de la red de covarianza estructural se ha considerado un indicador fisiopatológico importante de la esquizofrenia. En este trabajo, presentamos una nueva medida individualizada de la red de covarianza estructural, denominada red de similitud de textura (TSN), y planteamos la hipótesis de que la TSN podría revelar de manera fiable una heterogeneidad intersu...
PUBLICIDAD
Estás viendo una versión reducida de este contenido.
Para consultar la información completa debes registrarte gratuitamente.
Tan sólo te llevará unos segundos.
Y si ya estás registrado inicia sesión pulsando aquí.
La alteración de la red de covarianza estructural se ha considerado un indicador fisiopatológico importante de la esquizofrenia. En este trabajo, presentamos una nueva medida individualizada de la red de covarianza estructural, denominada red de similitud de textura (TSN), y planteamos la hipótesis de que la TSN podría revelar de manera fiable una heterogeneidad intersujetos única y patrones complejos de desconectividad en la esquizofrenia.
La TSN se construyó midiendo la covarianza de 180 mapas de características de la matriz de coocurrencia de niveles de gris en vóxeles tridimensionales entre áreas cerebrales en cada participante. Primero, probamos la validez y reproducibilidad de la TSN para caracterizar la variabilidad intersujeto en dos cohortes de sujetos sanos en estudios test-retest longitudinales.
Posteriormente, aplicamos la TSN para dilucidar la variabilidad intersujeto y los patrones de disconectividad en diez conjuntos de datos de casos y controles de esquizofrenia (609 casos de esquizofrenia frente a 579 controles), así como en un conjunto de datos de primer episodio de depresión (69 pacientes con depresión frente a 69 participantes de control).
El análisis test-retest demostró que la TSN presentaba una mayor variabilidad intersujeto que intrasujeto. Además, la TSN reveló de manera fiable una mayor variabilidad intersujeto tanto en la esquizofrenia crónica como en el primer episodio de esquizofrenia, pero no en la depresión. La TSN también detectó de manera reproducible un aumento y una disminución coexistentes de la fuerza de la TSN en áreas cerebrales generalizadas.
Además, se observó un aumento de la pequeñez global y la coexistencia tanto de la hiposincronización estructural en las redes centrales como de la hipersincronización en las redes periféricas en pacientes con esquizofrenia, pero no en pacientes con depresión.
Finalmente, la variabilidad intersujeto anormal y los patrones de fuerza de covarianza revelados por la TSN mostraron una correlación débil o inexistente con otras medidas de red de covarianza estructural individualizadas, la conectividad funcional y los cambios de volumen regional.
Estos hallazgos respaldan la confiabilidad de la TSN para revelar una heterogeneidad estructural única y desconectividad compleja en pacientes con esquizofrenia.
La capacidad de la TSN para identificar variaciones intersujeto y patrones específicos de desconectividad puede ofrecer nuevas perspectivas sobre la naturaleza de la esquizofrenia y su diferenciación con otros trastornos, como la depresión.
En resumen, la TSN proporciona una herramienta valiosa y fiable para el estudio de las anomalías de la conectividad cerebral en la esquizofrenia, lo que podría contribuir significativamente a mejorar la comprensión y el tratamiento de este trastorno complejo.
Para acceder al texto completo consulte las características de suscripción de la fuente original:https://www.biologicalpsychiatryjournal.com/
