Ha sido posible utilizar datos del teléfono móvil de un paciente como un complemento o alternativa a los métodos tradicionales de autoinforme y entrevista de evaluación de síntomas en psiquiatría. La evaluación basada en datos móviles es posible debido a la gran cantidad de información diversa disponible de un teléfono mó...
Ha sido posible utilizar datos del teléfono móvil de un paciente como un complemento o alternativa a los métodos tradicionales de autoinforme y entrevista de evaluación de síntomas en psiquiatría. La evaluación basada en datos móviles es posible debido a la gran cantidad de información diversa disponible de un teléfono móvil moderno, incluida la geolocalización, la actividad de la pantalla, el movimiento físico y la actividad de comunicación. Estos datos pueden ofrecer una visión mucho más precisa del estado mental que los métodos tradicionales, por lo que estamos motivados para continuar la investigación en esta dirección. Sin embargo, la recuperación pasiva de datos podría ser una invasión no deseada de la privacidad, y algunos pueden no dar su consentimiento a tal observación. Por lo tanto, es importante medir la disposición de los pacientes para dar su consentimiento a dicha observación si este enfoque se debe considerar para uso general.
El objetivo de este estudio fue medir las tasas de propiedad de los teléfonos celulares dentro de la población de pacientes, medir la disposición de la población de pacientes para usar su teléfono móvil como una herramienta de evaluación experimental para su trastorno de salud mental y, finalmente, determinar cómo es probable que los pacientes den su consentimiento para cada fuente individual de datos de colección de teléfonos móviles a través de la variedad de posibles fuentes de datos.
Los nuevos pacientes remitidos a una clínica de trastorno de ansiedad y estado de atención terciaria de agosto de 2016 a octubre de 2017 completaron una encuesta diseñada para medir la propiedad, el uso y la voluntad de instalar una aplicación de monitoreo de salud mental y proporcionar datos relevantes a través de la aplicación.
De los 82 encuestados, 70 (85%) informaron tener un teléfono móvil conectado a Internet. Cuando se les preguntó sobre la instalación de una aplicación hipotética de teléfono móvil para evaluar su trastorno de salud mental, el 41% (33/80) respondieron con total disposición a instalar con otro 43% (34/80) indicando la posible disposición para instalar dicha aplicación. La voluntad de otorgar permisos para tipos específicos de datos varía según la fuente de datos, y los encuestados menos dispuestos a aceptar la grabación y el análisis de audio (19% [15/80] encuestados dispuestos, 31% [25/80] potencialmente dispuestos) y más dispuestos a consentimiento para que la observación de la pantalla del teléfono móvil esté activada o desactivada (46% [36/79] encuestados dispuestos y 23% [18/79] potencialmente dispuestos).
Los pacientes encuestados tenían una alta incidencia de propiedad de teléfonos móviles conectados a Internet, lo que sugiere cierta verosimilitud para el enfoque general de la inferencia del estado de salud mental a través de datos de teléfonos móviles. Los pacientes también estuvieron relativamente dispuestos a aceptar la recopilación de datos de fuentes que eran menos personales pero expresaron menos disposición a la comunicación más personal y los datos de ubicación.
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