Autor/autores:
Isabel Morales-Muñoz, Matthew R. Broome y Steven Marwaha
Las pesadillas persistentes en la infancia se han asociado prospectivamente con psicosis y trastorno límite de la personalidad (TLP) en la adolescencia. Sin embargo, aún se desconoce en qué medida esta asociación también es cierta para los problemas de sueño conductuales, y los mecanismos potenciales están inexplorados. El objetivo de este estudio ...
Estás viendo una versión reducida de este contenido.
Para consultar la información completa debes registrarte gratuitamente.
Tan sólo te llevará unos segundos.
Y si ya estás registrado inicia sesión pulsando aquí.
Las pesadillas persistentes en la infancia se han asociado prospectivamente con psicosis y trastorno límite de la personalidad (TLP) en la adolescencia. Sin embargo, aún se desconoce en qué medida esta asociación también es cierta para los problemas de sueño conductuales, y los mecanismos potenciales están inexplorados.
El objetivo de este estudio es examinar las posibles asociaciones entre varios problemas de sueño informados por los padres en la primera infancia y los síntomas psicóticos y de TLP a los 11 a 13 años de edad y la mediación potencial de las asociaciones por depresión a los 10 años.
Este estudio de cohorte evaluó a 13 488 participantes en la cohorte de nacimiento de Avon Longitudinal Study of Parents and Children que fueron seguidos durante más de 13 años. Las mujeres embarazadas de Avon, Reino Unido, con fechas de parto previstas del 1 de abril de 1991 al 31 de diciembre de 1992, fueron invitadas a participar en el estudio. El análisis de datos se realizó del 1 de mayo al 31 de diciembre de 2019.
Las experiencias psicóticas a los 12 a 13 años de edad se evaluaron mediante la entrevista de síntomas similares a la psicosis, y los síntomas de TLP a los 11 a 12 años se evaluaron mediante la entrevista infantil del Reino Unido para el trastorno límite de la personalidad del DSM-IV. La duración del sueño nocturno informada por los padres, la frecuencia del despertar nocturno, la hora de acostarse y la regularidad de las rutinas del sueño se evaluaron cuando el niño tenía 6, 18 y 30 meses y 3, 5, 4, 8 y 5, 8 años de edad.
Los datos estaban disponibles en 7155 participantes (3718 niñas [52%]) que informaron síntomas de TLP y 6333 (3280 niños [52%]) que informaron síntomas de TLP. Mayor frecuencia del despertar nocturno a los 18 meses de edad (odds ratio [OR], 1. 13; IC del 95%, 1. 01-1. 26) y rutinas de sueño menos regulares a los 6 meses (OR, 0. 68; IC del 95%, 0. 50-0. 93), 30 meses (OR, 0. 64; IC 95%, 0. 44-0. 95), y 5. 8 años (OR, 0. 32; IC 95%, 0. 19-0. 53) de edad se asociaron significativamente con experiencias psicóticas en la adolescencia, mientras que la duración del sueño nocturno más corto (OR, 0. 78 ; IC del 95%, 0, 66-0, 92) y la hora de acostarse más tarde a los 3. 5 años de edad (OR, 1. 32; IC del 95%, 1. 09-1. 60) se asociaron significativamente con los síntomas de DBP.
Los resultados del análisis de mediación fueron consistentes con todas estas asociaciones, excepto la hora de acostarse más tarde a los 3. 5 años y el TLP en la adolescencia, que no tuvo asociación. La depresión a los 10 años de edad mediaba las asociaciones entre los despertares nocturnos frecuentes a los 18 meses de edad (estimación corregida por sesgo, -0. 005; IC del 95%, -0. 008 a -0. 002; P = . 002) y rutinas de sueño irregulares a los 5. 8 años de edad. edad (estimación corregida por sesgo, −0. 006; IC 95%, −0. 010 a −0. 003; P = . 003) con psicosis.
Los hallazgos sugieren que algunos problemas de sueño conductuales en la infancia están claramente asociados con el inicio de la psicosis y el TLP en la adolescencia, siguiendo diferentes vías. Además, la depresión a los 10 años de edad puede mediar solo la asociación con la psicosis. Estos hallazgos contribuyen al diseño de intervenciones más personalizadas en psicosis y TLP.
Para acceder al texto completo consulte las características de suscripción de la fuente original:https://jamanetwork. com/
Goldberg y Stephen M. Stahl. Prologo de Alan F. Schatzberg. Durante las últimas cuatro décadas, l...
COMPRAR AQUÍ