Resumen
Los trastornos psicóticos están asociados con un deterioro significativo en el funcionamiento ocupacional que puede comenzar en la fase prodrómica de la enfermedad. Como resultado, las personas con un trastorno psicótico no pueden mantener su clase social desde el nacimiento. El objetivo de este estudio fue examinar la distribución de las clases sociales de los individuos que presentan un primer episodio de psicosis (FEP) en comparación con la población en general y para su familia de origen. Evaluamos si la deriva social estaba asociada con la depresión, la desesperanza y las tendencias suicidas en la primera presentación.
Se incluyeron a todos los individuos con un FEP que se presentaron a un servicio de salud mental de la comunidad entre 1995 y 1999 y para un servicio de intervención temprana entre 2005 y 2011. El diagnóstico se estableció mediante la Entrevista Clínica Estructurada para diagnósticos del DSM-IV y las evaluaciones clínicas incluyeron la Escala de Depresión de Calgary para la Esquizofrenia, la Escala de Desesperanza de Beck y la Escala de Intención Suicida.
330 individuos fueron incluidos en el estudio y en el momento de la presentación, los individuos con un FEP eran más propensos a estar representados en clases sociales más bajas en comparación con la población general. El 43% experimentó una deriva social y esto se asoció con un diagnóstico de un trastorno no afectivo, abuso de cannabis co-mórbido y un DUP más largo. Las personas que no experimentaron una deriva social, tenían un mayor riesgo de desesperanza.
La deriva social es común en los trastornos psicóticos; sin embargo, las personas que, o bien mantienen su clase social o experimentan movilidad de clase social ascendente son más susceptibles a la desesperanza.
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