La dislexia, el trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) y el trastorno por déficit de atención (ADD) muestran perfiles clínicos distintos que pueden incluir deterioros auditivos y relacionados con el lenguaje. En la actualidad, aún no está disponible un diagnóstico basado en el cerebro objetivo de estos trastornos del desarrollo. Se investigaron los sistemas neuro-auditivos de la dislexia, TDAH, ADD, y niños control de la misma edad (N = 147) utilizando técnicas de neuroimagen, magnetoencefalografía y psicoacústica. Todos los subgrupos de trastorno mostraron un plano temporal izquierdo de gran tamaño y una asincronía interhemisférica anormal (10-40 ms) de la respuesta P1 evocada de la auditiva primaria. Teniendo en cuenta la morfología de la corteza auditiva derecha, formas de onda fuente P1 bilaterales, y el rendimiento auditivo, los tres subgrupos de trastorno podrían diferenciarse de forma fiable con precisiones pendientes de 89-98%. Por lo tanto, por primera vez, proporcionamos biomarcadores para el diagnóstico diferencial basado en el cerebro de la dislexia, TDAH, y ADD.
El método no sólo permite la discriminación entre los dos subtipos de trastornos de atención (TDAH y ADD), un tema controvertido discutido durante décadas en la comunidad científica, pero también reveló la posibilidad de identificar objetivamente los casos comórbidos. Digno de mención, en niños que tocan un instrumento musical, después de tres años y medio de formación, las asincronías interhemisféricas observadas se redujeron en alrededor de 2/3, lo que sugiere una fuerte influencia beneficiosa de la experiencia de la música en el desarrollo del cerebro. Estos hallazgos podrían tener implicaciones a largo alcance tanto para la investigación y la práctica y permiten una comprensión profunda de la etiología relacionada con el cerebro, el diagnóstico y la terapia basada en la música de trastornos del desarrollo relacionados auditivo comunes y discapacidades de aprendizaje.
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