Investigadores del Instituto de Psiquiatría, Psicología y Neurociencia (IoPPN) del King's College de Londres (Reino Unido) descubrieron que las personas que vivían con enfermedades crónicas y que recibieron el programa digital guiado por un terapeuta llamado COMPASS mostraron una reducción significativa del malestar psicológico (una puntuación combinada de ansiedad y depresión) 12 semanas después de iniciar el estudio.
Se reclutaron 194 pacientes a través de organizaciones benéficas para enfermedades a largo plazo, incluidas Crohn's & Colitis UK, Kidney Care UK, MS Society, Shift.ms y Psoriasis Association en el Reino Unido. La mitad de los participantes recibió el programa COMPASS y la otra mitad no. Ambos grupos continuaron accediendo a su apoyo benéfico habitual.
En general, el 89 por ciento de los participantes que recibieron COMPASS mostraron una mejora clínicamente significativa en la angustia, en comparación con el 45 por ciento de los que no tuvieron acceso al programa. Además de mejorar la ansiedad y la depresión, COMPASS también se asoció con una mejor capacidad para realizar actividades diarias, una reducción de la angustia específica de la enfermedad y una mejor calidad de vida.
Desarrollado con el apoyo del Programa Mente y Cuerpo de King's Health Partners, COMPASS adaptó protocolos estándar de terapia cognitivo-conductual (TCC) para integrar las necesidades de salud física y mental y abordar específicamente los desafíos de vivir con una condición de salud a largo plazo. Utilizando vías interactivas adaptadas a las necesidades individuales, el programa ayuda a las personas a controlar sus síntomas de ansiedad y depresión junto con la creación de estrategias para controlar los factores estresantes asociados con vivir con una afección a largo plazo, como recaídas o tratamientos desagradables.
Después de 12 semanas, durante las cuales los participantes pudieron completar cualquiera de las 11 sesiones digitales interactivas de COMPASS en casa y recibir hasta cinco llamadas de apoyo de 30 minutos con su terapeuta, los pacientes que recibieron COMPASS informaron mayores mejoras en la mayoría de los resultados en comparación con aquellos que no recibieron COMPASS. acceso al programa.
Los hallazgos resaltan que el uso de intervenciones digitales, como COMPASS, que colocan la condición de salud física a largo plazo en el centro del tratamiento para la ansiedad y la depresión, son efectivas, escalables y pueden administrarse con un tiempo mínimo del terapeuta.
