PERITO PSIQUIATRA O FORENSE ¿QUÉ ES MEJOR?

RESUMEN

La respuesta depende del contexto del caso judicial y el objetivo de la evaluación. Tanto el perito psiquiatra como el psiquiatra forense tienen funciones complementarias, aunque no idénticas.

Un perito psiquiatra, es un psiquiatra que actúa como perito independiente o de parte, ya sea designado por un juez, una de las partes o el propio tribunal. Su finalidad es emitir un informe pericial sobre el estado mental, la imputabilidad y el daño psíquico. Puede intervenir tanto en causas penales, civiles, laborales o familiares. Ofrece una mirada clínica aplicada al caso concreto, con mayor flexibilidad interpretativa.

Por su parte, el perito forense es un médico con formación específica en medicina legal y forense, habitualmente adscrito a los cuerpos médico-forenses del Estado o al Instituto de Medicina Legal. Su función es evaluar desde una perspectiva objetiva e institucional, en el marco de procedimientos judiciales oficiales. Su labor se circunscribe generalmente al sistema judicial penal o civil. Su informe tiene mayor peso probatorio por su carácter oficial e imparcial.

Es posible concluir que cuando se requiere una evaluación oficial y neutral en una causa penal o para determinar imputabilidad, es preferible un forense. En cambio, si una de las partes desea aportar una evaluación complementaria en casos de daño psíquico e incapacidad civil, puede ser más conveniente un perito psiquiatra. De todas formas, no resulta inhabitual que en muchos procesos se recurra a ambos tipos de peritos, lo que permite al tribunal comparar conclusiones y fortalecer la valoración judicial.

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