Los datos reflejados en la bibliografía demuestran que las depresiones ligeras constituyen el grueso del conjunto de depresiones que se encuentran entre la población general. Los mismos datos señalan que estas depresiones no sólo se diagnostican mal, sino que no reciben tratamiento con fármacos antidepresivos eficaces, lo que constituye un factor de riesgo importante para la cronificación y tiene consecuencias de largo alcance para la personalidad de los sujetos. Hay datos suficientes que reflejan que las depresiones ligeras responden mejor a dosis terapéuticas de antidepresivos que a ansiolíticos, psicoterapia o a nada. Y que el modelo psicoterapéutico más relevante en estos casos es la terapia cognitiva, dadas las características alexitímicas de esos cuadros y la eficacia no superior a placebo de otras psicoterapias basadas en la introspección. Créditos de la imagen: I don't know what can I do, por ·S, en Flickr.