La esquizofrenia es un trastorno mental grave, crónico y heterogéneo caracterizado por síntomas positivos, negativos y cognitivos. Los síntomas negativos generalmente están presentes en la fase prodrómica; El diagnóstico precoz y el tratamiento de los síntomas negativos es un problema de salud importante, ya que un inicio insidioso dominado por síntomas negativos se asocia con un peor pronóstico. Los antipsicóticos, que son eficaces para tratar síntomas positivos, generalmente no son eficaces para tratar síntomas negativos o cognitivos.
Este estudio presenta una mujer de 23 años con síntomas graves que requiere ingreso hospitalario en su primera visita. La paciente, había experimentado varios años de deterioro psicosocial y síntomas psiquiátricos putativos, pero no se había buscado atención médica previamente, retrasando mucho el diagnóstico de esquizofrenia. El inicio temprano de la esquizofrenia, la mayor duración de la psicosis no tratada y los síntomas negativos graves, que tienen opciones de tratamiento limitadas, se relacionan con un mal pronóstico con peor resultado funcional.
El estudio describe un régimen de tratamiento con cariprazina durante 52 semanas en monoterapia y sigue la impresionante mejoría clínica del paciente confirmada por las puntuaciones PANSS, CGI, y pruebas psicológicas.
En el momento del ingreso en el hospital, la paciente tenía una puntuación total en la escala PANSS muy alta, lo que corresponde con “gravemente enfermo” o “entre los pacientes más extremadamente enfermos” en la escala CGI-S.
Tras 16 semanas de tratamiento con cariprazina, la puntuación de la subescala positiva PANSS y la puntuación del factor PANSS para síntomas positivos (PANSS-FSPS) se redujeron en un 46.15% y 55%, respectivamente; y la puntuación de la subescala negativa PANSS y la puntuación del factor PANSS para síntomas negativos (PANSS-FSNS) se redujeron en un 44,44% y 41,31%, respectivamente. La mejoría en los síntomas positivos y negativos se mantuvieron durante el curso del tratamiento. En las visitas posteriores (32 y 52 semanas), la puntuación total PANSS se redujo a un nivel cercano al mínimo, y la disminución de las puntuaciones tanto de los síntomas positivos como los negativos fue bastante considerable con valores cercanos al 70% en ambas visitas. La mejoría del paciente también se reflejó en las mediciones clínicas y funcionales, con la puntuación CGI-S reducida a 2 (dudosamente enfermo) y una puntuación CGI-I de 1 (mucho mejor) que indica una mejora bastante notable.
Cariprazina fue bien tolerada, con un SEP leve observado después de 8 semanas, pero sin efectos metabólicos, cardíacos u otros efectos secundarios.
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