Autor/autores:
Azgad Gold, Rael D Strous y Paul S Appelbaum
La pandemia de COVID-19 ha afectado a la comunidad psiquiátrica de muchas maneras. Se han abordado los aspectos del tratamiento y el tratamiento psiquiátrico pero los aspectos legales y éticos que afectan la práctica clínica deben igualmente ser considerados. El distanciamiento físico, el aislamiento y la cuarentena se han convertido en los pilares mundi...
Estás viendo una versión reducida de este contenido.
Para consultar la información completa debes registrarte gratuitamente.
Tan sólo te llevará unos segundos.
Y si ya estás registrado inicia sesión pulsando aquí.
La pandemia de COVID-19 ha afectado a la comunidad psiquiátrica de muchas maneras. Se han abordado los aspectos del tratamiento y el tratamiento psiquiátrico pero los aspectos legales y éticos que afectan la práctica clínica deben igualmente ser considerados.
El distanciamiento físico, el aislamiento y la cuarentena se han convertido en los pilares mundiales de la prevención de la propagación del coronavirus. Aunque adherirse a las normas y regulaciones en constante cambio relacionadas con COVID-19 es un desafío para todos, parece especialmente agotador para los pacientes con trastornos psiquiátricos. El aumento de la ansiedad, la falta de conocimiento, el juicio alterado y la dependencia de los demás en la vida cotidiana, entre otras razones, podrían interferir con su adhesión a las medidas preventivas.
Por lo tanto, los pacientes con trastornos psiquiátricos pueden ser más propensos a violar las reglas COVID-19, lo que lleva a conflictos con las autoridades.
Para acceder al texto completo consulte las características de suscripción de la fuente original: https://www. thelancet. com/
