Autor/autores:
Giel KE, Martus P, Paul G...(et.al)
La respuesta de estrés a la pandemia de COVID-19 puede diferir entre las etapas tempranas y posteriores. Los datos longitudinales sobre el desarrollo de la salud mental de la población durante la pandemia de COVID-19 son escasos. Hemos investigado trayectorias de salud mental y predictores de cambio en una muestra probabilística de la población general en Alemania al c...
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La respuesta de estrés a la pandemia de COVID-19 puede diferir entre las etapas tempranas y posteriores. Los datos longitudinales sobre el desarrollo de la salud mental de la población durante la pandemia de COVID-19 son escasos.
Hemos investigado trayectorias de salud mental y predictores de cambio en una muestra probabilística de la población general en Alemania al comienzo y después de 6 meses de la pandemia. Realizamos una encuesta longitudinal en una muestra probabilística basada en la población de adultos alemanes.
El estudio actual analizó datos de una primera evaluación en mayo de 2020 (T1; N = 1412) y una segunda en noviembre de 2020 (T2; N= 743). La salud mental se evaluó en términos de ansiedad y depresión utilizando el cuestionario de Salud del Paciente-4 (PHQ-4).
Los resultados de salud mental en T1 se compararon con los datos de la norma PHQ-4. Se investigaron las trayectorias a lo largo del tiempo en función de las clasificaciones de resultados de las puntuaciones del PHQ-4.
Los predictores de resultados y cambios en la salud mental se identificaron mediante un análisis de regresión múltiple. En la primavera de 2020, los participantes mostraron puntajes de PHQ-4 significativamente más altos en comparación con los datos normales; sin embargo, la ansiedad y la depresión en general se mantuvieron bajas también 6 meses después.
El 6, 6 % de los encuestados mostró un deterioro de la salud mental en el otoño de 2020, entrando en rangos subclínicos y clínicos, superando la proporción de personas con mejores resultados. Las variables sociodemográficas asociadas con la angustia mental en T1 no fueron principalmente predictivas para el cambio en T2.
Incluso bajo el estrés prolongado relacionado con la pandemia, la salud mental se mantuvo principalmente estable en la población general. Se debe monitorear el desarrollo adicional del considerable subgrupo que experimenta deterioro de la depresión y la ansiedad, para adaptar los esfuerzos de prevención e intervención.
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