Autor/autores:
Mullarkey M , Dobias M , Sung J...(et.al)
Fondo La ansiedad está aumentando en los Estados Unidos durante la pandemia de COVID-19, y los mandatos de distanciamiento social impiden la atención de salud mental en persona. Un mayor control percibido sobre la ansiedad ha predicho una disminución de la patología de la ansiedad, incluidas las respuestas adaptativas a los factores estresantes incontrolables. La evi...
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La ansiedad está aumentando en los Estados Unidos durante la pandemia de COVID-19, y los mandatos de distanciamiento social impiden la atención de salud mental en persona.
Un mayor control percibido sobre la ansiedad ha predicho una disminución de la patología de la ansiedad, incluidas las respuestas adaptativas a los factores estresantes incontrolables.
La evidencia sugiere que las intervenciones de una sola sesión sin terapeuta pueden fortalecer el control percibido sobre emociones como la ansiedad; programas similares, si están diseñados para el contexto de COVID-19, podrían tener un valor sustancial para la salud pública.
Nuestro informe registrado evaluó una intervención en línea de una sola sesión sin terapeuta dirigida al control percibido sobre la ansiedad en el contexto de COVID-19 frente a una intervención de placebo que fomentaba el lavado de manos.
Probamos si la intervención podría
(1) disminuir la ansiedad generalizada y aumentar el control percibido sobre la ansiedad y
(2) lograr esto sin disminuir las intenciones de distanciamiento social.
Probamos estas preguntas utilizando un diseño entre sujetos en una muestra de probabilidad ponderada de adultos estadounidenses reclutados a través de una plataforma en línea cerrada (es decir, Prolific). Todos los resultados se indexaron a través de cuestionarios de autoinforme en línea.
De 522 individuos aleatorizados, 500 (95, 8%) completaron la encuesta de referencia y la intervención. Los análisis por intención de tratar que utilizaron a todos los participantes asignados al azar (N = 522) no encontraron respaldo para los efectos terapéuticos o iatrogénicos; los efectos sobre la ansiedad generalizada fueron d = -0, 06 (IC del 95 %: -0, 27 a 0, 15; p = 0, 48), los efectos sobre el control percibido fueron d = 0, 04 (IC del 95 %: -0, 08 a 0, 16; p = 0, 48) y los efectos sobre las intenciones de distanciamiento social fueron d = –0, 02 (IC del 95 %: –0, 23 a 0, 19; P = 0, 83).
Las fortalezas de este estudio incluyeron una muestra grande y representativa a nivel nacional y la adherencia a las prácticas de ciencia abierta. Se discuten las implicaciones para las intervenciones escalables, incluido el desafío de enfocarse en el control percibido sobre la ansiedad.
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