Resumen

Las vías de los problemas de conducta en la vida temprana de la depresión en los adultos jóvenes siguen siendo poco conocidas. El objetivo de este estudio es probar las vías de desarrollo de los problemas de conducta en la vida temprana a la depresión a los 18 años. Los datos (n = 3.542) provinieron del Estudio Longitudinal Avon de Padres e Hijos (ALSPAC). Las trayectorias problemáticas de conducta derivadas anteriormente (edades 4-13 años) se utilizaron para examinar asociaciones con la depresión entre las edades de 10 a 18 años, y el papel de los factores de la primera infancia como posibles factores de confusión.

Más del 43% de los adultos jóvenes con depresión en la cohorte ALSPAC tenía un historial de problemas de conducta en niños o adolescentes, dando una fracción atribuible poblacional de 0,15 (IC 95% 0,08-0,22). La asociación entre los problemas de conducta y la depresión a los 18 años fue considerable, incluso después de ajustar por la depresión previa (odds ratio 1,55, IC del 95%: 1,24 a 1,94). Los problemas de conducta persistentes de inicio temprano llevaron el mayor riesgo para la depresión posterior. La irritabilidad caracterizó la depresión para las personas con un historial de problemas de conducta.

Los problemas de conducta de vida temprana están robustamente asociados con el trastorno depresivo tardío y pueden ser objetivos útiles para la intervención temprana.

Acceso al texto completo en inglés.