Autor/autores:
Wangyue Li, Minyao Xie, Haocheng Chen...(et.al)
La terapia cognitivo-conductual (TCC) se considera el tratamiento de primera línea para el trastorno obsesivo-compulsivo (TOC). Este estudio tiene como objetivo investigar si la mejora de los síntomas clínicos en pacientes con TOC después del tratamiento con TCC se asocia con cambios en la conectividad funcional (FC) en estado de reposo de la subregión de la am&...
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La terapia cognitivo-conductual (TCC) se considera el tratamiento de primera línea para el trastorno obsesivo-compulsivo (TOC).
Este estudio tiene como objetivo investigar si la mejora de los síntomas clínicos en pacientes con TOC después del tratamiento con TCC se asocia con cambios en la conectividad funcional (FC) en estado de reposo de la subregión de la amígdala, y si estos cambios pueden servir como posibles predictores de un tratamiento de cuatro meses. eficacia.
Recopilamos datos de imágenes de resonancia magnética funcional (rs-fMRI) en estado de reposo de 57 pacientes con TOC y 50 sujetos sanos al inicio del estudio.
En el grupo de pacientes, también se obtuvo rs-fMRI después de completar un tratamiento de TCC de 8 semanas y 4 meses después del tratamiento.
Se realizó un análisis de rsFC de todo el cerebro utilizando la subregión de la amígdala como punto inicial. Analizamos los patrones de FC en relación con los resultados clínicos de 4 meses para dilucidar la eficacia a largo plazo de la TCC en pacientes con TOC.
Se encontró que la respuesta al tratamiento antes del tratamiento estaba asociada con una reducción de la rsFC entre la amígdala basolateral izquierda (BLA) y la circunvolución temporal superior izquierda (STG) al inicio del estudio.
Los FC más bajos antes del tratamiento se correlacionaron negativamente con la gravedad de los síntomas del TOC medidos por la escala de Gravedad Obsesivo Compulsiva de Yale-Brown (Y-BOCS).
Además, el área bajo la curva de características operativas del receptor (ROC) para la FC entre el BLA izquierdo y el STG al final del tratamiento fue del 73, 0% y del 70, 4% para los grupos efectivo-ineficaz y remitido o no remitido, respectivamente.
A los 4 meses de seguimiento, el área bajo la curva ROC para los grupos efectivo-ineficaz y remitido o no remitido fue del 83, 9% y el 76, 5%, respectivamente.
Estos hallazgos sugieren que la actividad funcional cerebral en pacientes con TOC puede predecir la respuesta al tratamiento con TCC, y los cambios longitudinales en la actividad funcional cerebral relevante después del tratamiento con TCC se asocian con la respuesta al tratamiento en el TOC.
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