Se habla mucho en los últimos años de la obesidad como una pandemia, y no hay duda de que lo es. Tal y como apunta Ana de Hollanda, coordinadora del Área de Obesidad de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN), "en los últimos 30 años su prevalencia se ha triplicado". Existen múltiples motivos que pueden explicar esto, aunque entre los más importantes están el creciente sedentarismo, tanto a nivel laboral como en el tiempo libre. "Entorno obesogénico, creciente desplazamiento en transportes motorizados, falta de espacios verdes y senderos de bicicletas", apunta la doctora. Además, "la alimentación, debido a la mayor disponibilidad de productos ultraprocesados hipercalóricos, palatables y económicos; así como el estrés que produce mantener un ritmo de vida frenético, con la consiguiente falta de tiempo para cocinar y dormir", agrega. Teniendo en cuenta que más de la mitad de los adultos y un tercio de los niños españoles tienen exceso de peso, la especialista reconoce que "el reto del abordaje de la obesidad es sumamente complejo, pues se necesita una actuación coordinada de múltiples sectores que van desde la educación nutricional y culinaria, a la concientización de la obesidad como enfermedad".
Más concretamente, la hoja de ruta debería incluir las medidas siguientes: "Las políticas y regulaciones gubernamentales, a través de la publicidad de los alimentos, los impuestos a los productos ultraprocesados, etiquetado nutricional; acceso a productos saludables, fomento de producción local que pueden abaratar los costos; promoción de la actividad y el ejercicio físico; políticas de salud, acceso a la atención médica de calidad, fomento de creación de unidades de obesidad, formación de los profesionales médicos, incluyendo la salud mental; investigación, apoyo a proyectos nacionales, colaborativos sobre la fisiopatología de la obesidad y sus tratamientos", enumera.
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En resumen, es un desafío muy importante. Más todavía teniendo en cuenta que, a pesar de esta preocupación, la obesidad no para de crecer. A juicio de Anna de Hollanda, "esto puede ser debido a la desinformación que lleva a que muchas personas reciban información no contrastada sobre los tratamientos para la obesidad". También cree que influye "el marketing agresivo sobre los alimentos, pues tiene poder inmenso sobre todo en los niños y en los jóvenes, además de los factores que hemos mencionado".
No obstante, la experta considera, por otro lado, que "el reconocimiento de los medicamentos contra la obesidad como el avance científico más importante de 2023 por la revista `Science´ subraya los significativos progresos en el tratamiento farmacológico de esta enfermedad crónica". "Los años de investigación en el rol de las hormonas gastrointestinales en el hambre y la saciedad, se han coronado con la comercialización de los análogos de GLP1 y los análogos duales GLP1-GIP, dando inicio a una nueva era en el tratamiento de la obesidad", remarca. Por otra parte, la doctora señala que "la medicina de precisión ha hecho un aporte muy relevante con setmelanotide que actúa en mutaciones concretas de la vía del receptor melanocortina 4". "Estos tratamientos ofrecen nuevas esperanzas para la gestión efectiva de la enfermedad, mejorando tanto la salud física como la calidad de vida de las personas afectadas", afirma. En cuanto a los retos más urgentes en el abordaje de la obesidad, Ana de Hollanda explica que "incluyen la mejora de la prevención y educación, el acceso a alimentos saludables, la promoción de la actividad física, el fortalecimiento de las políticas de salud pública, la investigación continua, el acceso a tratamientos, la colaboración multisectorial, la reducción de desigualdades y un sistema robusto de monitoreo y evaluación". Abordar estos retos de manera integral y coordinada, concluye, "es esencial para enfrentar eficazmente la epidemia de obesidad".
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