La depresión llena las consultas de Psiquiatría. Los casos se han disparado con respecto a la prepandemia, tal y como se refleja en las consultas de Psiquiatría de todo el SNS. La asistencia especializada se ha visto tan incrementada que la presión roza la saturación.
Según datos de la OMS, la pandemia COVID-19 ha aumentado la prevalencia de ansiedad y depresión en el mundo en un 25 %.
Si tomamos como referencia un número aproximado de 1.000.000 de pacientes con depresión en España, supondría un incremento a en torno 200.000 nuevos casos de depresión mayor; si hablamos de síndromes depresivos, llegaría hasta 400.000 nuevos casos.
Estos datos han sido dados a conocer en la presentación del XXXI Curso Nacional de Actualización en Psiquiatría por el doctor Edorta Elizagarate, director del Curso y jefe de Servicio de Psiquiatría de la Red de Salud Mental de Álava.
Curso Nacional
En la presentación participaron también el doctor Narcís Cardoner, director del servicio de Psiquiatría del Hospital de la Santa Creu i Sant Pau (Barcelona); y la doctora Maria Fe Bravo, jefa de servicio del Área de Psiquiatría, Psicología Clínica y Salud Mental del Hospital Universitario La Paz de Madrid.
El XXXI Curso Nacional de Psiquiatría es una importante cita científica que volvió a convertir a Vitoria-Gasteiz en la capital de la Salud Mental y que reunió de forma presencial en el auditorio del Palacio de Congresos Europa a 500 expertos en Salud Mental y más de 100 lo hacen de forma online.
Se trata de la reunión anual de referencia de la Psiquiatría estatal en la que se presentarán las actualizaciones y líneas estratégicas en Salud Mental. En esta ocasión se celebra de forma conjunta con el II Congreso Nacional de la Sociedad Española de Psiquiatría Clínica.
Demanda
Consideran los especialistas que ante la "elevadísima demanda de personas que precisan los servicios de Salud Mental, el “sistema sanitario no está preparado para absorber esta demanda”, han alertado, al tiempo que han apostado "por ampliar los recursos".
En su opinión, tiene que haber una reestructuración/ampliación de los servicios de Salud Mental. "al igual que en el sistema sanitario español ha sido necesario transformar las UCI y los hospitales, y fuimos capaces de hacer la vacunación en campos de fútbol o desde el coche".
“La población general ha respondido a las diferentes situaciones que ha provocado la actual pandemia de COVID-19 (restricciones sociales y falta de socialización, problemas económicos…) con la presencia de síntomas depresivos", han asegurado.
Crisis
Y también con trastorno por estrés postraumático, y de ansiedad, "que en muchos casos han desembocado en problemas de salud mental, como la depresión. El diagnóstico psiquiátrico post-covid es una realidad y no es un mito”, han aseverado.
El doctor Edorta Elizagarate ha destacado que “es una crisis mundial.
Las estadísticas y estudios en otros países muestran las mismas tendencias generales hacia un deterioro de la salud mental con un aumento de los síndromes depresivos”.
"La pandemia de la COVID-19 ha incrementado estos datos. Lamentablemente, la escasez de psiquiatras, psicólogos y otros profesionales de la Salud Mental es la norma mundial y se necesita más formación y recursos", ha subrayado el experto.
Psiquiatras
Por su parte, el doctor Cardoner ha explicado que “hay mas prevalencia de enfermedades y la Atención Primaria absorbe menos esa demanda, por sus problemas estructurales y aumento de pacientes".
Los expertos siguieron con interés todas las intervenciones.
"Todo esto hace que los pacientes nos lleguen peor a la consulta, se descompensen y evolucionen más los cuadros psiquiátricos”, ha remarcado.
Sostiene el experto que los Servicios de Psiquiatría están desbordado. "Recibimos pacientes vía Urgencias porque no puedes esperar los plazos que les da desde la AP".
Tal y como añade Cardoner, eso repercute sobre el resto del sistema, principalmente sobre las plantas de agudos. "Nos faltan camas y también hay demora en la atención más ambulatoria y más comunitaria”.
Desafío
En esta misma línea, la doctora Bravo ha afirmado que “para los profesionales de la Salud Mental supone un desafío. “Primero porque hay más personas con este problema y hay que darles respuesta".
Y, en segundo lugar, porque pone de manifiesto que en la depresión influyen también más factores que los propiamente vinculados a la propia neurobiología de los sujetos y a la propia herencia familiar que, evidentemente, en muchos casos tiene mucha importancia como en los trastornos bipolares”.
Factores
En este contexto, la doctora Bravo ha reconocido que “factores del ámbito psicosocial provocados por la pandemia (factores estresantes, destrucción de la sociabilidad, etc.) han influido a que una problemática como es la depresión se extienda”.
El congreso fue organizado por PSISENDA (Asociación para la Investigación del Trastorno Mental Severo) con la colaboración de la Facultad de Medicina de la Universidad de Deusto, de la Red de Salud Mental de Álava del Departamento de Salud del Gobierno Vasco, Osakidetza y el Ilustre Colegio de Médicos de Álava.