La discinesia tardía (TD) es un síndrome heterogéneo de movimientos hipercinéticos involuntarios que a menudo es persistente y se produce tardíamente durante el tratamiento con antipsicóticos.
La reciente aprobación de dos análogos de tetrabenazina que agotan la dopamina basados en ensayos controlados aleatorios ofrece por primera vez un enf...
La discinesia tardía (TD) es un síndrome heterogéneo de movimientos hipercinéticos involuntarios que a menudo es persistente y se produce tardíamente durante el tratamiento con antipsicóticos.
La reciente aprobación de dos análogos de tetrabenazina que agotan la dopamina basados en ensayos controlados aleatorios ofrece por primera vez un enfoque terapéutico basado en la evidencia para el TD.
Estos agentes se utilizan de manera óptima en el contexto de un enfoque integral para el manejo del paciente que incluye un programa práctico de detección y monitoreo, criterios sensibles y específicos para el diagnóstico de TD, conciencia de la gravedad y el impacto del trastorno, conversaciones informadas con pacientes y cuidadores y una base racional para prescribir decisiones sobre los agentes antipsicóticos y adyuvantes continuos.
Las áreas de datos limitados o no concluyentes, sesgos y malentendidos sobre aspectos clave, y el abandono de la capacitación sobre TD en los últimos años contribuyen a las barreras para brindar atención efectiva y promover la seguridad del paciente.
La introducción de fármacos antipsicóticos específicos hace más de medio siglo marcó el comienzo de una era de renovado optimismo terapéutico e interés revitalizado en la comprensión de la neurobiología de las enfermedades mentales graves. Sin embargo, un inconveniente preocupante de esta clase de agentes que dependen de las propiedades de bloqueo del receptor de dopamina fue su impacto en las funciones de los ganglios basales subyacentes a los trastornos del movimiento inducidos por el fármaco.
Aunque la mayoría de estos efectos adversos fueron de inicio agudo y reversibles después de la medicación para el cese, los movimientos de la discinesia tardía (TD) que fueron persistentes y asociados con el tratamiento prolongado fueron los más preocupantes.
Hasta la reciente aprobación de dos nuevos análogos de tetrabenazina, no había tratamientos basados en la evidencia para el TD. Aun así, hay varias áreas de malentendidos, sesgos o lagunas en el conocimiento que pueden limitar la aplicación efectiva y segura de estos nuevos medicamentos.
Ahora que los tratamientos aprobados están disponibles, es aún más importante conocer las características clínicas de la TD y cuándo y cómo se pueden aplicar estos nuevos tratamientos para mejorar los resultados exitosos y la calidad de vida.
Para acceder al texto completo consulte las características de suscripción de la fuente original:https://www.dovepress.com