La Comunidad de Madrid implantará a principios del próximo año una Cartera de Servicios de Asistencia Psicológica en las 25 residencias públicas adscritas a la Agencia Madrileña de Atención Social (AMAS) cuyo diseño está ultimando la Administración autonómica.
Así lo ha anunciado este viernes la consejera de Familia, Juventud y Asuntos Sociales, Ana Dávila, en su visita a las nuevas instalaciones del Colegio Oficial de la Psicología de Madrid, donde ha destacado la importancia del trabajo de estos profesionales, ya sea con mayores, mujeres víctimas de violencia o personas en riesgo de exclusión, entre otros.
Esta nueva Cartera de Servicios verá la luz en 2024 tras meses de trabajo en los que han participado todos los psicólogos con los que cuentan los recursos de la AMAS.
En ella figurarán programas como Preingreso, Acogida, Adaptación e Integración al Centro; Valoración Neuropsicológica; Psicoestimulación; Intervención Psicoafectiva; Control de Conductas Disruptivas; Apoyo y Asesoramiento en los Cuidados dirigido a Cuidadores y Familiares; Prevención de Sujeciones y el Programa de Prevención y Manejo de Adicciones.
Desde la incorporación de estos profesionales en 2020 a los centros de la AMAS se ha prestado asistencia a través de terapias individuales o colectivas a casi 5.000 usuarios de residencias y centros de día, con 10.000 valoraciones psicológicas, ha subrayado Dávila.
Esto ha permitido canalizar, ha incidido la consejera, a 188 mayores para interconsultas externas, bien a servicios de Psiquiatría de hospitales o a los centros de Salud Mental del Servicio Madrileño de Salud (Sermas).
SEGUIMIENTO CONTINUADO A MÁS DE 2.000 RESIDENTES
Al mismo tiempo se han efectuado talleres en cada recurso de la AMAS para el resto de trabajadores. A día de hoy, se está realizando un seguimiento continuado a más de 2.000 residentes.
Ana Dávila, psicóloga de profesión, ha defendido la "atención exquisita" que reciben los más de 20.000 colegiados de la Comunidad por parte de esta institución cuyo decano, José Antonio Luengo, ha defendido el trabajo permanente tanto con la Consejería de Familia, Juventud y Asuntos Sociales, como con la de Educación, Ciencia y Universidades que permitan "acercar la psicología al sistema educativo", pero también "acercar a profesionales que conocen y que tienen una formación específica, a las necesidades de la población".
En este sentido, Luengo ha subrayado la importancia de contar con psicólogos en los centros educativos, donde los alumnos están "175 días al año, desde los 3 hasta los 16 años" o más.
"Todo lo que invirtamos en favorecer la prevención de desajustes y desórdenes psicológicos y promover el bienestar emocional y psicológico es importante", ha remarcado el decano del Colegio, quien ha aprovechado para reclamar un mayor papel por parte del Gobierno central para crear una especialidad de psicología educativa en los cuerpos de profesores de Secundaria, "lo mismo que hay de orientación educativa".
Por otro lado, José Antonio Luengo se ha felicitado por que tras la pandemia la gente haya "perdido más el miedo a hablar de sus necesidades psicológicas", pues como ha subrayado, muchos de los problemas de salud mental que padece la ciudadanía tienen que ver con "condicionantes sociales".
"La enfermedad mental no es algo en general que surja porque el sistema nervioso se agrieta y enferma sin más, sino que muchas veces enferma porque a veces no vivimos tal vez como debiéramos vivir, como personas", ha concluido.
