MADRID, 4 Jun.(EUROPA PRESS)

Investigadores del Hospital General de Massachusetts (MGH, por sus siglas en inglés), en Estados Unidos, han descubierto que la señalización de la dopamina en la corteza cerebral puede predecir cambios en la extensión de la comunicación entre las redes cerebrales clave en la memoria de trabajo.

Sus hallazgos, que se publican en la edición digital de 'Science Advances', pueden sentar las bases para estudiar cómo interrupciones en la señalización de la dopamina contribuyen a los déficit de memoria de trabajo que son característicos de la esquizofrenia y otros trastornos psiquiátricos.

"Nuestro hallazgo principal es que la señalización dentro de la corteza de la dopamina predice el grado en que la red de control frontoparietal --que media directamente en el rendimiento de la memoria de trabajo-- se desconecta de la red en modo automático, que está activa cuando el cerebro está despierto, pero dirigido hacia tareas internas, como pensar sobre los acontecimientos pasados o futuros", dice el autor principal del trabajo, Joshua Roffman, del Departamento de Psiquiatría de MGH. "La separación de estas dos redes es la que nos permite cambiar nuestro enfoque desde eventos internos hacia el desempeño de muchos tipos de tareas cognitivas", explica.

Para su investigación, el equipo de MGH utilizó un dispositivo capaz de tomar imágenes simultáneamente de RM y PET, disponible en el Centro de Imágenes Biomédicas Martinos en el MGH. La capacidad para llevar a cabo ambas exploraciones al mismo tiempo permite medir en tiempo real tanto la señalización de la dopamina --utilizando un agente de formación de imágenes PET que se une a receptores de dopamina D1-- y la interacción de redes cerebrales particulares, como se mide por resonancia magnética funcional.

Tras confirmar que la conexión entre la red de control frontoparietal y la red en modo automático cae abruptamente cuando voluntarios sanos comienzan a participar en una tarea de memoria de trabajo, los investigadores demostraron que la separación entre las dos redes fue más fuerte en los individuos con densidad cortical más baja de receptores D1, lo que refleja mayores niveles de dopamina. La densidad de receptores D1 no afectó a la precisión con la que los participantes del estudio realizaron la tarea de memoria.

Roffman, profesor asociado de Psiquiatría en la Escuela de Medicina de la Universidad de Harvard, señala que este resultado está en línea con estudios previos en modelos de primates que muestran que la señalización a nivel celular de la dopamina es esencial para un aspecto clave de la memoria de trabajo: determinar a qué señales neurales prestar atención y a cuáles ignorar.

Este estudio es el primero en examinar cómo se amplía esta actividad a nivel celular en toda la red en el cerebro de los seres humanos sanos. "Esperamos que entender mejor el papel de la dopamina en la organización de las redes corticales nos lleve mejorar la memoria de trabajo en pacientes con esquizofrenia y otras enfermedades mediante la optimización de la señalización de la dopamina", concluye este experto.

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