Diferencias y similitudes de género en los subtipos latentes del trastorno por videojuegos en adolescentes

Antecedentes

El trastorno por videojuegos (GD, por sus siglas en inglés) se ha convertido en una preocupación creciente de salud pública, especialmente entre los adolescentes, etapa en la que los videojuegos ocupan un papel central en el ocio, la socialización y la identidad.

A pesar de que las investigaciones han documentado diferencias de género significativas en la prevalencia y la expresión del GD, los estudios tipológicos previos han ofrecido una comprensión limitada de las similitudes y divergencias en los subtipos latentes de este trastorno entre chicas y chicos.

Además, aunque se reconoce la relevancia de los factores interpersonales —como el apoyo social o la participación en conductas de acoso escolar y cibernético—, pocas investigaciones han explorado de manera integral su papel en los distintos perfiles de riesgo del GD.

Objetivos

El presente estudio tuvo como objetivo identificar clases latentes de severidad de los síntomas del trastorno por videojuegos en adolescentes mujeres y hombres por separado, y comparar estas clases en función de variables intra e interpersonales.

Métodos

Se analizaron datos de dos muestras representativas de adolescentes húngaros provenientes de las olas 2018 y 2022 del estudio Health Behaviour in School-aged Children (HBSC), con tamaños muestrales de N = 3170 y N = 3550, respectivamente.

Los adolescentes completaron cuestionarios autoinformados que evaluaron:

- Severidad de los síntomas del GD,

- Apoyo percibido (de familia, amigos y profesores),

- Participación en acoso escolar y ciberacoso,

- Satisfacción vital,

- Síntomas psicosomáticos, y

- Uso problemático de redes sociales.

Se aplicaron análisis de clases latentes (LCA) para identificar subgrupos de riesgo y examinar sus correlatos psicosociales.

Resultados

En ambos géneros se identificaron entre dos y tres clases latentes, correspondientes a niveles de bajo, moderado y alto riesgo de GD.

La pertenencia a clases con mayor severidad sintomática se asoció consistentemente con:

- Mayor uso problemático de redes sociales,

- Más síntomas psicosomáticos,

- Mayor implicación en conductas de acoso o victimización, y

- Menor apoyo social en todos los ámbitos (familia, pares y escuela).

Aunque los grupos de riesgo moderado y alto fueron más frecuentes en varones, los resultados sugieren una reducción progresiva de la brecha de género en el riesgo de GD.

Conclusiones

Los perfiles latentes mostraron patrones de síntomas similares entre chicas y chicos, lo que indica que los mecanismos subyacentes del GD podrían ser comparables entre géneros.

La asociación del GD con el uso problemático de redes sociales y la participación en dinámicas de acoso destaca la interconexión entre los entornos digitales, la salud mental y las relaciones interpersonales.

Estos hallazgos subrayan la necesidad de intervenciones preventivas y educativas sensibles al género, centradas en fortalecer el apoyo social y promover un uso equilibrado y saludable de las tecnologías digitales en la adolescencia.

Resumen modificado por Cibermedicina

Para acceder al texto completo consulte las características de suscripción de la fuente original:https://www.sciencedirect.com/