Autor/autores:
Robin N. Groen, Johanna T. W. Wigman, Melissa Vos...(et.al)
Introducción El factor general de la psicopatología, conocido como "factor p", ha sido objeto de creciente interés debido a su propuesta de reflejar una vulnerabilidad general a la psicopatología. Esta idea sugiere que una predisposición subyacente podría estar presente en diversos trastornos mentales. En este estudio, nos proponemos examinar cómo ...
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El factor general de la psicopatología, conocido como "factor p", ha sido objeto de creciente interés debido a su propuesta de reflejar una vulnerabilidad general a la psicopatología. Esta idea sugiere que una predisposición subyacente podría estar presente en diversos trastornos mentales. En este estudio, nos proponemos examinar cómo esta "vulnerabilidad" se asocia con la desregulación afectiva y conductual en la vida diaria, con el objetivo de entender mejor los mecanismos que pueden mantener esta vulnerabilidad.
Se utilizaron datos del estudio TRAILS (Estudio de Seguimiento de la Vida Individual de los Adolescentes), que incluyó a 2, 772 participantes evaluados a los 11, 14, 16, 19 y 22 años. Se aplicó un modelo bifactorial para identificar un factor general de psicopatología, además de dominios específicos de problemas internalizantes, externalizantes (EXT), déficit de atención/hiperactividad y del espectro autista. Tras la quinta evaluación de TRAILS, una submuestra de participantes con mayor riesgo de psicopatología (n = 133, edad promedio = 22, 6 años, 43% mujeres) recibió un protocolo de diario diario durante seis meses, registrando una evaluación cada día. Se utilizó un enfoque de ecuación estructural dinámica para analizar la intensidad media, la variabilidad, la inercia (arrastre) y la coocurrencia intradía de afectos y comportamientos ansiosos-tensos y depresivos-retraídos, en relación con las evaluaciones del fa.
Contrariamente a las expectativas, no se encontró que las evaluaciones más altas del factor general de psicopatología estuvieran asociadas con una mayor intensidad media de afectos y comportamientos negativos diarios, como los de tipo ansioso-tenso o depresivo-retraído.
Esto sugiere que las personas con una mayor vulnerabilidad psicopatológica, como refleja el factor p, no experimenten necesariamente mayores niveles promedio de emociones negativas.
Los hallazgos indican que las diferencias individuales en las evaluaciones del factor general de psicopatología no se manifiestan en diferencias en los niveles promedio de afectos y comportamientos diarios.
En cambio, están relacionados con una mayor reactividad afectiva y conductual al entorno. Este patrón podría reflejar una susceptibilidad a la psicopatología que no se manifiesta directamente en una mayor intensidad emocional, sino en una mayor sensibilidad a los cambios contextuales.
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