PUBLICIDAD-

Ver todo

DEMANDAS SOCIALES DEL CUIDADO DE LA SALUD: ¿QUÉ NOS INDICA EL COMPORTAMIENTO DE LA MUJER FRENTE AL HIV/SIDA?

  Seguir al autor

Autor/autores: Sandra Susacasa , Anna Candreva, José María Susacasa
Fecha Publicación: 26/04/2018
Área temática: Psicología general .
Tipo de trabajo:  Conferencia
Universidad Nacional de La Plata

RESUMEN

En nuestra línea de investigación: Educación para la Salud, de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación y del Departamento de Pedagogía Médica de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de La Plata, hemos encontrado en el concepto de género un aporte al análisis de las nuevas problemáticas que se han visibilizado en nuestra sociedad vinculadas a la salud.
La actividad de nuestro grupo de trabajo se centra, a través del Programa “Creación de Espacios Educativos como modo de prevención” en el abordaje de las problemáticas de la Educación para la Salud. Una de áreas del mismo desarrolla una línea de investigación que da sustento a los diseños de actividades de extensión universitaria y formación de recursos humanos.
Esta actividad de investigación se dirige a la búsqueda de los conocimientos necesarios para el diseño de un marco teórico, interdisciplinario y referencial, específico para fundamentar propuestas que logren comprometer a los protagonistas. De ese modo intentamos multiplicar la capacitación de todos los niveles de la comunidad, apelando a los recursos de innovaciones educativas y desarrollando estrategias que permitan la construcción de actitudes preventivas y cambios de aquellos comportamientos que no lo son.
Dentro de este tópico se han desarrollado acciones educativas y tareas de investigación tendientes a establecer un diagnóstico de situación con respecto a las actitudes de riesgo de la comunidad y sus componentes. Las problemáticas que están instaladas en esta área pasan a ser el objeto de estudio de los proyectos de investigación, tales como: HIV/sida, enfermedades de transmisión sexual, embarazo de niñas y adolescentes, accidentes, violencia, sólo por dar algunos ejemplos.

Palabras clave: género, educacion para la salud, políticas públicas


VOLVER AL INDICE

Url corta de esta página: http://psiqu.com/1-8696

Contenido completo: Texto generado a partir de PDf original o archivos en html procedentes de compilaciones, puede contener errores de maquetación/interlineado, y omitir imágenes/tablas.

DEMANDAS

SOCIALES

DEL

CUIDADO

DE

LA

SALUD:

¿QUÉ

NOS

INDICA

EL

COMPORTAMIENTO DE LA MUJER FRENTE AL HIV/sida?
Sandra Susacasa, Jose M Susacasa y Anna Candreva.
candreva@amc .com.ar

INTRODUCCIÓN
En nuestra línea de investigación: Educación para la Salud, de la Facultad de Humanidades y
Ciencias de la Educación y del Departamento de Pedagogía Médica de la Facultad de Ciencias
Médicas de la Universidad Nacional de La Plata, hemos encontrado en el concepto de género
un aporte al análisis

de las nuevas

problemáticas, que se han visibilizado en nuestra

sociedad, vinculadas a la salud.
La actividad de nuestro grupo de trabajo se centra, a través del Programa "Creación de
Espacios Educativos como modo de prevención",

en el abordaje de las problemáticas de la

Educación para la Salud. Una de las áreas del mismo desarrolla proyectos de investigación
que dan

sustento a los diseños de actividades de extensión universitaria

y formación de

recursos humanos.
Esta actividad de investigación se dirige a la búsqueda de los conocimientos necesarios para el
diseño

de un marco teórico, interdisciplinario y referencial, específico para fundamentar

propuestas que logren comprometer a los protagonistas. De ese modo intentamos multiplicar
la capacitación de todos los niveles de la comunidad, apelando a los recursos de innovaciones
educativas y desarrollando estrategias que permitan la construcción de actitudes preventivas
y cambios de aquellos comportamientos que no lo son.
Dentro de este tópico se han desarrollado acciones educativas y tareas de investigación
tendientes a establecer un diagnóstico de situación con respecto a las actitudes de riesgo de la
comunidad y sus componentes. Las problemáticas que están instaladas en esta área pasan a
ser el objeto de estudio de los proyectos de investigación, tales como: HIV/sida, enfermedades
de transmisión sexual, embarazo de niñas y adolescentes, accidentes, violencia, sólo por dar
algunos ejemplos.

MARCO CONCEPTUAL Y FUNDAMENTACION DE NUESTRO TRABAJO
La problemática de la mujer en las décadas del sida es universal, devastadora y quizá el pico
del iceberg que, si no logramos dimensionar, puede hundir a ciertas comunidades, que no
II Congreso Virtual Internacional de Psicología
http://congresopsicologia.psiquiatria.com - marzo 2018. Psiquiatria.com

DEMANDAS SOCIALES DEL CUIDADO DE LA SALUD: ¿QUÉ NOS INDICA EL
COMPORTAMIENTO DE LA MUJER FRENTE AL HIV/sida?

circunstancialmente son las más expuestas y desprotegidas. Las demandas sociales de cuidado
de la salud no satisfechas, manifestadas de manera elíptica a través de fenómenos tales como
embarazos no deseados, ETS, HIV/sida, y el aumento del ritmo de su crecimiento indican,
como una alarma, la gravedad del estado de situación.
En este contexto la situación de la mujer frente al sida es aún más angustiosa ya que el
género femenino constituye el grupo con más rápido crecimiento en riesgo de infección por
HIV y cerca del 42 % de las personas infectadas en todo el mundo. Presenta,

además,

características diferentes de la enfermedad que aún no son del todo comprendidas, tal como se
expuso en la 1ª Conferencia de la IAS realizada en Buenos Aires en julio del 2001.
. Por otra parte las diferencias en el tratamiento según el género han sido una constante desde
el comienzo de la epidemia. Las diferencias (en menos para las mujeres) de inclusión en
ensayos de terapia y en la recepción de eficaces tratamientos antirretrovirales se observa en
Estados Unidos y otros países, tal como lo muestran los estudios de Mocroft y Anderson Esto
no puede

vincularse, al menos linealmente, a una cuestión económica ya que aún teniendo

la misma cobertura médica y características similares en cuanto de la infección HIV es menos
probable, en términos estadísticos, que la mujer reciba la eficaz HAART. Esto da una categoría
particular a los estudios de este campo pues indican la existencia de componentes no
manifiestos, muchas veces ocultos, y el nivel de complejidad de la problemática específica de
la mujer en la epidemia.
Una de las situaciones de desigualdades persistentes que aparece como emblemática es la
situación de la mujer frente al SIDA. Este constituye el grupo de más rápido crecimiento de
infección por HIV. En la Argentina los primeros casos notificados de SIDA fueron: en hombres
1982, y 1987 en mujeres. Esta diferencia temporal, con una adecuada política pública, habría
detenido su expansión. El no haber intervenido a tiempo y apropiadamente, a generado una
situación que puede resumirse con algunos datos obtenidos en forma conjunta entre
ONUSIDA, OMS y el Programa Nacional de Lucha contra los RH, SIDA y ETS que aún
considerando que todos los cálculos sobre el VIH deben evaluarse críticamente, tanto si se
basan en encuestas como en datos de vigilancia centinela, son capaces de

mostrar

aproximadamente que:
- 127.000 (115.000 a 134.000) personas viven con VIH/SIDA en Argentina, de las cuales un
30% desconocerían su situación serológica.
Los datos recogidos a partir de las mujeres embarazadas son especialmente útiles para
calcular las tendencias del VIH y, junto a las encuestas nacionales, ayudan a configurar el
panorama de la epidemia.

II Congreso Virtual Internacional de Psicología
http://congresopsicologia.psiquiatria.com - marzo 2018. Psiquiatria.com

DEMANDAS SOCIALES DEL CUIDADO DE LA SALUD: ¿QUÉ NOS INDICA EL
COMPORTAMIENTO DE LA MUJER FRENTE AL HIV/sida?

La epidemia de SIDA en Argentina ha evolucionado en forma disímil desde que se registró el
primer caso en el año 1982, alcanzándose al 31de diciembre de 2005 un total de 30.496 casos
notificados en el Programa Nacional de Lucha contra los Retrovirus del Humano, SIDA y ETS.
Sin embargo al calcular el retraso en el envío de las notificaciones, se estima que el total de
enfermos diagnosticados es de 31.900.
Las provincias que presentan mayor tasa son: Tierra del Fuego y Misiones (36/ 100.000
habitantes), Salta (48/100.000) y Jujuy 61/100000), del otro lado de la curva y por debajo de
la media país se presentan Chaco 0,58 / 100.000) y Córdoba, Catamarca y Corrientes con una
tasa de 3/100.000 habitantes
La tendencia tanto en Argentina como en el resto del mundo expresa que la epidemia se
extiende cada vez más en mujeres y el número de casos de SIDA en mujeres diagnosticadas
anualmente no ha dejado de crecer Unido esto a que la mayor concentración de casos se ha
presentado en edades sexualmente activas, radica la importancia de focalizar acciones de
prevención y diagnóstico precoz de VIH o SIDA en la mujer y principalmente en la
embarazada, para poder suministrar tratamiento adecuado para la mujer y además evitar así
la transmisión vertical. Actualmente una de las Políticas más fuertes se encamina a la
erradicación de la Transmisión Vertical del VIH.
Según mostraron las estadísticas, la enfermedad afecta fundamentalmente a la franja de edad
de población económicamente activa y se concentra mayoritariamente en ambos sexos entre
20 y 39 años, considerando el acumulado de casos es entre 25 y 34 años, pero los nuevos
diagnósticos de SIDA se produjeron con más frecuencia entre 25 y 39 años.
En la población de sexo femenino se puede observar que la distribución por edad de la
enfermedad presenta el mayor pico en el rango entre 25 y 29 años, aunque se puede decir que
el período de mayor frecuencia es de 25 a 34 años. En la población de sexo masculino la
mayor concentración en la distribución por edad en los enfermos de SIDA, es entre 25 y 34
años.
Pero aún hoy la distribución por edad de los casos de SIDA da evidencias significativas de que
un grupo de alta vulnerabilidad son los adolescentes, debido a que si la edad de desarrollo de
la enfermedad es en el rango que comprende a los adultos jóvenes, significa que hubo muchas
posibilidades de contraer la infección durante su adolescencia.
Además, sobre el total de casos, el 24% son femeninos; en el gráfico de pirámide de población
se visualiza un incremento proporcional en dicho sector (29%). Como así también, la edad de
mayor prevalencia de 25 a 34 años, con leve incremento proporcional de los de 35 a 39 años.
Esta distribución no refleja el patrón de transmisión que sigue la epidemia actualmente.

II Congreso Virtual Internacional de Psicología
http://congresopsicologia.psiquiatria.com - marzo 2018. Psiquiatria.com

DEMANDAS SOCIALES DEL CUIDADO DE LA SALUD: ¿QUÉ NOS INDICA EL
COMPORTAMIENTO DE LA MUJER FRENTE AL HIV/sida?

En el grupo de casos de SIDA de mayores de 12 años según el sexo se observó que la
evolución de las categorías de transmisión ha tenido diferente peso en cada sexo. En mujeres
la tendencia decreciente del número de casos en usuarios de drogas inyectables (UDIs) unido
al incremento de casos por transmisión sexual desprotegida en heterosexuales, ha dado como
resultado que casi el 85% de los nuevos casos diagnosticados de SIDA fueron por transmisión
sexual en mujeres heterosexuales, con incremento de la vía de transmisión desconocida para
ambos sexos.
En hombres la tendencia es semejante pero no tan marcada. La transmisión sexual en el 65 %
de los nuevos casos diagnosticados, dividido de la siguiente manera: el 43% en hombres
heterosexuales y el 22% hombres que tienen sexo con hombres. Los UDIs fueron el 21%.
Estos cambios de patrón de la vía de transmisión, se comienzan a visualizar a fines de los 80,
principios de los 90, dando como resultado que actualmente una de las poblaciones más
vulnerables es la población sexualmente activa y principalmente la población heterosexual de
bajos recursos financieros
Asimismo, si se analiza el nivel de instrucción de los nuevos diagnósticos de VIH se observa
que el 63% no completo la escuela secundaria, y que además existen grandes diferencias
jurisdiccionales. Las provincias de Chubut y Tierra del Fuego no alcanzan al 20% con niveles
de educación incompletos, mientras que las provincias de Salta y La Rioja representan más del
90%, mostrando así las diferencias regionales respecto a la población vulnerable y
correlacionándose en su mayoría con los indicadores educacionales país.
Debemos contextualizar esta cuestión en nuestros países donde la atención de la salud cada
vez es más deficiente, el estado de pobreza no permite la utilización de terapias tan caras
como la antirretrovirales en toda la población necesitada y la lactancia materna significa, la
más de las veces,

la única posibilidad que se dispone de una maduración y crecimiento

satisfactorio en los niños en la etapa de la vida en la que estos procesos sostienen el futuro de
las funciones superiores del SNC. Teniendo en cuenta que los lineamientos de la OMS para la
prevención de la MTCT en mujeres con infección de HIV continúa siendo que se debe evitar la
lactancia materna en todos los casos de infección materna, al menos hasta que se cumpla la
meta que señaló la Cumbre de Naciones Unidos del 2001, que busca que las mujeres
embarazadas e infectadas tengan acceso a la terapia antirretroviral, esta privación significa la
pérdida de la esperanza para muchos niños que si logran sortear una situación de riesgo caen
en otra.
En esta trama aparece con nitidez la situación de la mujer como el objeto psicológico, que
recibe las mayores demandas de cuidado de su grupo de pertenencia y paradójicamente es la
más vulnerable frente al sistema. Esta situación, naturalmente, genera un aumento de

II Congreso Virtual Internacional de Psicología
http://congresopsicologia.psiquiatria.com - marzo 2018. Psiquiatria.com

DEMANDAS SOCIALES DEL CUIDADO DE LA SALUD: ¿QUÉ NOS INDICA EL
COMPORTAMIENTO DE LA MUJER FRENTE AL HIV/sida?

frustración y muchas veces el escape a la resignación y la pasividad frente al sentimiento de
culpa que se instala a la hora de no poder satisfacer esas demandas. Frente a la evidencia de
la imposibilidad de responder a las representaciones sociales de su rol en cada uno de sus
contextos y desde su soledad, poco le queda por hacer si no puede acceder a niveles de toma
de conciencia que le permitan trascender de lo individual a lo colectivo.Los datos cuantitativos,
que pueden encontrarse permanentemente en la bibliografía con mucha abundancia, son
contundentes. Las nuevas situaciones de riesgo que se van generando tales como las muertes
e invalidez por accidentes en poblaciones jóvenes, son otro indicador de la interrelación de los
sujetos con un medio cada vez más oprimente. Como datos cuantitativos parece suficiente
recordar que cada día más de 7,000 niños y jóvenes entre los 10 a 24 años se infectan por
HIV, cinco adolescentes por cada minuto, y que esta cifra también va en aumento.
En referencia específica a la situación de la mujer y el sida encontramos lo siguiente:


En América Latina y el Caribe la epidemia del SIDA cada vez afecta más a mujeres y
niños.



La información serológica confirma que la prevalencia de infección por VIH es elevada
en el Caribe. En trabajadoras sexuales y mujeres que viven en pareja con varones
infectados esta prevalencia llega al 70%.



Informes de morbilidad de la Asociación Panamericana para la Salud reportan
importantes incrementos en la incidencia de casos de SIDA en mujeres. Otras zonas de
la región, pese a no estar tan afectadas, experimentan también un incremento en el
número de casos de mujeres infectadas por el VIH



En Argentina los casos notificados de SIDA han crecido desde su aparición en 1982. La
tasa de incidencia acumulada para la Argentina es de 50,6 por cien mil habitantes. En
cuanto a la distribución de los casos de infectado según sexo, aproximadamente cada 3
hombres se infecta 1 mujer, si bien esta relación ha ido y continua disminuyendo. El
predominio de la enfermedad en las mujeres de edad fértil naturalmente aumenta el
riesgo de transmisión perinatal. La vía más frecuenta de transmisión es la heterosexual
(63%) la

que ha crecido de manera sostenida desde el inicio de la epidemia. La

transmisión perinatal del HIV es responsable del 96% de enfermos de SIDA menores de
13 años Los niños menores de 13 años representan uno de los más altos porcentajes de
América y un dato significativo. El 80% de enfermos están en las grandes ciudades. La
mayor proporción de mujeres afectadas se observa fundamentalmente en la Provincia
de Buenos Aires, lugar de gran contacto con la capital del país. Este hecho coincide con
la mayor cantidad de menores afectados en esa jurisdicción. La edad media de los
casos es de 26 años. Analizando por sexo, se observa que la edad promedio de las

II Congreso Virtual Internacional de Psicología
http://congresopsicologia.psiquiatria.com - marzo 2018. Psiquiatria.com

DEMANDAS SOCIALES DEL CUIDADO DE LA SALUD: ¿QUÉ NOS INDICA EL
COMPORTAMIENTO DE LA MUJER FRENTE AL HIV/sida?

mujeres es menor que la de los hombres. El mayor % de los casos tienen entre 25 y 34
años. La distribución geográfica muestra que el 81 % de los casos se concentran en
Capital Federal y Provincia de Buenos Aires. Este porcentaje aumenta al 92,8% si
agregamos los distritos de Santa Fé y Córdoba. Los bajos índices están asociados a
déficit en la notificación. A ello hay que agregarle que el SIDA es la primera causa de
muerte entre personas de 15 a 39 años en la Ciudad de Buenos Aires.


La pobreza, que en nuestro país es del 30%, no permite la utilización de terapias, que
se muestran cada vez más eficaces, pero

tan caras para

toda la población que la

necesita.


La

meta que señaló la Cumbre de Naciones Unidos

que el

80% de mujeres,

embarazadas e infectadas, tuvieran acceso a la terapia antirretroviral, no se logró.
En conclusión los resultados epidemiológicos revelan que el SIDA se ha instalado en la
Argentina, con una creciente incidencia en los grupos juveniles y, específicamente son las
mujeres jóvenes quienes se hallan en mayor situación de riesgo frente a la enfermedad.
En el 2016 Durante la XXI Conferencia Internacional sobre el Sida, que se lleva a cabo en la
ciudad sudafricana de Durban, se conocieron nuevos datos sobre el HIV.
En el mundo el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) que causa el Sida, ha
desencadenado una epidemia mayor de la que se temía con las predicciones en la primera
Cumbre, Las enfermedades de transmisión sexual y VIH/SIDA pueden tener consecuencias
graves para el mundo, ya que interfieren la función social y la calidad de vida de los afectados.
A largo plazo pueden llegar a producir incapacidad física y mental, reducción de la fecundidad
e incluso la muerte.
Durante la XXI Conferencia Internacional sobre el Sida, que se llevóa cabo en la ciudad
sudafricana de Durban, se conocieron datos que no modifican el estado de la cuestión para la
Argentina, sobre el HIV. De acuerdo con un estudio realizado por el Instituto para la Medición
y la Evaluación de la Salud (IHME) de la Universidad de Washington, Argentina es el país con
mayor cantidad de nuevos contagios en América del Sur en los últimos diez años: de 2005
a 2015 aumentaron en un 7,8%, es decir, pasaron de ser 2850 a 6320 el año pasado. Al
mismo tiempo, el Ministerio de Salud de la Nación informó que en Argentina se registran unas
6000 nuevas infecciones por año y 1400 muertes por Sida.
La investigación, que incluye estadísticas de 188 países y se publicó ayer en la revista The
Lancet HIV, reveló que en el país existen 120 mil personas (cuatro de cada mil) que viven con
el

virus de

la

inmunodeficiencia

humana,

de

las

cuales el

70%

recibe

la

terapia

antirretroviral para controlar la enfermedad, lo que supera el promedio global de cobertura que
es del 41%.
II Congreso Virtual Internacional de Psicología
http://congresopsicologia.psiquiatria.com - marzo 2018. Psiquiatria.com

DEMANDAS SOCIALES DEL CUIDADO DE LA SALUD: ¿QUÉ NOS INDICA EL
COMPORTAMIENTO DE LA MUJER FRENTE AL HIV/sida?

Al mismo tiempo, el Ministerio de Salud de la Nación informó que en Argentina se registran
unas 6000 nuevas infecciones por año y 1400 muertes por Sida. "La incidencia del VIH en la
Argentina indica que en 2015 se infectaban 14,4 personas por cada 100.000, precisó el IHME
tras aclarar que los contagios de HIV en Argentina están creciendo más rápido que en otros
países. En sintesis Argentina lidera el ranking de países de América Latina con mayor cantidad
de nuevos casos de HIV registrados en los últimos diez años con 7,8%. Le sigue Paraguay, con
el 4,9%, Bolivia con el 4,8%, Colombia: 4,6%, Ecuador: 3,9%, Perú: 1,7%; Venezuela: 0,4%;
Uruguay: -0,5% y Chile con -3,3%. Siendo las relaciones sexuales sin protección, el mayor
causante. De acuerdo con el estudio, las relaciones sexuales sin preservativo fueron la
principal causa de contagio de HIV en Argentina: 9 de cada 10 personas a las que les fue
diagnosticado un resultado positivo entre 2012 y 2014 contrajeron el virus por no usar
preservativo en las relaciones sexuales. De ese total, la mitad tuvo encuentros sexuales
heterosexuales y la otra mitad homosexuales. En tanto, la transmisión de madre a hijo fue del
1% mientras que el uso de jeringas fue la causa del 0,3% de las infecciones.
Christopher Murray, director del instituto, reconoció que "será difícil que el mundo pueda
controlar la epidemia" en los próximos 15 años como lo indican los Objetivos de Desarrollo
Sostenible de las Naciones Unidas. "Todos los involucrados en la salud de la población
(investigadores, responsables políticos, profesionales, empresas farmacéuticas, entre otros)
tienen que comprender que, aun habiendo más personas viviendo con VIH por más tiempo, no
podremos acabar con el sida sin detener las nuevas infecciones", informó en un comunicado a
modo

de concientización

global pese

a

que

las

nuevas

infecciones

de

HIV

a

nivel

global disminuyeron un 0,7% entre 2005 y 2015.
En esta trama aparece la situación de la mujer como receptora de las demandas de cuidado y
paradójicamente la más vulnerable. Se encuentra frente a la imposibilidad de responder a las
exigencias que le generan las representaciones sociales y el rol asignado desde el contexto
sociocultural. La socialización estereotipada de acuerdo al género, marca profundamente a
hombres y mujeres en su actitud respecto del cuidado del cuerpo y salud.
Desde este marco conceptual se desprenden preguntas a las que debemos buscarle
respuestas: ¿Por qué resulta tan difícil que las estrategias, implementadas hasta ahora,
ayuden a superarlas condiciones de vulnerabilidad de la mujer frente al HIV/SIDA?
Se ha intentado, desde los organismos internacionales

fortalecer y coordinar tareas

destinadas a la prevención de estas enfermedades, ya se celebró, en enero de 1988 en la
ciudad de Londres, la cumbre mundial de Ministerios de Salud sobre programas de prevención
de SIDA. Esto indica que se contaba con la evidencia de la gravedad de la situación. No
obstante, la problemática va en aumento a pesar aún del avance en la terapéutica.

II Congreso Virtual Internacional de Psicología
http://congresopsicologia.psiquiatria.com - marzo 2018. Psiquiatria.com

DEMANDAS SOCIALES DEL CUIDADO DE LA SALUD: ¿QUÉ NOS INDICA EL
COMPORTAMIENTO DE LA MUJER FRENTE AL HIV/sida?

Se establece que las intervenciones deben coordinarse y extenderse a la prevención de otras
ETS. Los programas deben promover el concepto global de salud sexual. Deben estar dirigidas
a la juventud (dentro y fuera de la escuela) y prioritariamente a los grupos de alto riesgo
(trabajadores sexuales, consumidores de drogas e incluir particularmente a la mujer. El éxito
en las actividades de promoción del cambio de conductas requiere de un mayor poder de las
mujeres, de la expansión de los servicios para ETS, la mejor gestión de los programas y la
mejora de la investigación y la capacitación en el área.
El comportamiento sexual es biológico y socialmente maleado y muy resistente al cambio. Los
resultados de las encuestas, muestran que la mayoría de los encuestados sabe que pueden
contraer el virus pero todos responden que su riesgo de enfermarse es bajo o nulo. Con los
datos actuales no podemos pensar que esto se haya modificado a pesar de las campañas y
otros modos de intervención utilizados hasta ahora y fuera del contexto educativo.
La estrategia para prevenir la transmisión del VIH fue la recomendada por la OMS: difusión de
mensajes informativos que reduzcan los comportamientos que puedan exponer a la
transmisión del virus. No obstante, los casos de infectados aumentaron ya que la naturaleza
de la enfermedad y su modo de transmisión a través de las relaciones sexuales, imponen
grandes obstáculos al trabajo sostenido en la información, debido a las resistencias sociales y
culturales que interfieren en la discusión abierta del problema.
Esta realidad ya nos va indicando uno de los elementos fundamentales a la hora de programar
acciones de intervención. Un educador de salud que se enfrenta a tales actitudes y
comportamientos debe contar con una sólida formación pedagógica que le permita diseñar
propuestas educativas apropiadas a cada medio cultural y no agotar su función a la mera
información, recomendaciones y consejos.
Parecería importante entonces, proceder a implementar en cada país programas nacionales
apropiados para frenar y prevenir el SIDA, con énfasis en la labor de prevención, información
y educación, teniendo en cuenta las diferentes circunstancias sociales y culturales, los
diferentes modos de vida y los valores de cada grupo humano. Por tanto la indagación de:
¿cuales son los modos apropiados para incidir positivamente en nuestro estado de situación?
¿Cómo implementar acciones de educación formal y no formal? Y muchas otras son requisitos
previos a los diseños de programas de intervención. No atender a ello implica el riesgo de
actuar por ensayo y error.

ACERCA DE NUESTRO TRABAJO

II Congreso Virtual Internacional de Psicología
http://congresopsicologia.psiquiatria.com - marzo 2018. Psiquiatria.com

DEMANDAS SOCIALES DEL CUIDADO DE LA SALUD: ¿QUÉ NOS INDICA EL
COMPORTAMIENTO DE LA MUJER FRENTE AL HIV/sida?

Frente a este estado, si se busca una aproximación a la comprensión de esta problemática,
para poder diseñar modos más apropiados de intervención, la construcción de nuevas
categorías de análisis como las que permite el concepto género son imprescindibles.
Hemos encontrado

necesario el análisis de componentes no manifiestos, muchas veces

ocultos, y ahondar en la complejidad de la problemática social. Por tanto hemos debido incluir
conceptos, y recursos metodológicos, brindados por la investigación educativa. En este sentido
Incluimos el concepto género, por: * constituir una construcción y manifestación de la
condición social, tanto de

hombres como mujeres. *permitir dar luz a la

complejidad de

interrelaciones con los componentes fundantes de la sociedad (edad, etnia, etc.).* analizar los
valores asignados a lo femenino y masculino que socialmente se expresan en un orden
jerárquico de predominio.
Uno de nuestros objetivos es instalar en la dimensión pedagógica la problemática de la
educación para la salud, enfatizando el estudio de la educación sexual, desde una construcción
interdisciplinaria que genere los conocimientos suficientes para fundamentar propuestas
innovadoras capaces de mejorar el estado de la cuestión y sostenga los contenidos apropiados
para la educación de la comunidad, la formación docente, en ámbitos formales y no formales
de educación, la promoción de la salud y la prevención.
El estado de las necesidades de cuidado de la

salud colectiva nos exige algunas

consideraciones acerca de la educación como modo de prevención. Algunos de los acuerdos
implícitos y explícitos a partir de programas como Salud y Educación para todos en el año
2000 de organismos tales como UNESCO y OMS requieren de una revisión reflexiva.
Encontramos esto relevante ya que el logro de cambios de comportamiento de riesgo o la
generación de comportamientos de autocuidado, requieren de la perspectiva de género en la
elaboración de espacios apropiados a la diversificación en los curricular, la mejor gestión de
los programas, el desarrollo de la investigación educativa y la capacitación de los docentes. La
equidad de género en la educación permite una mirada diferente y supera como estrategia a la
suma de conocimientos y a los conocimientos ya existentes en las asignaturas.
Por todo lo anterior encontramos que la problemática de la mujer y su relación con la infección
del VIH/SIDA es quizá la que pone en mayor relieve las necesidades insatisfechas de saludeducación que padecen los integrantes más vulnerables de nuestra sociedad por su severidad,
urgencia, universalidad y ritmo de crecimiento alarmarte.
Frente a esta realidad, el Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre HIV-SIDA sostiene
que llegar a los adolescentes, niños y mujeres es la estrategia más adecuada para modificar la
tendencia al aumento de la propagación de la infección, recomendación que debe hacerse
extensiva a todos los programas de prevención dirigido a estos grupos. Lo que ha resultado

II Congreso Virtual Internacional de Psicología
http://congresopsicologia.psiquiatria.com - marzo 2018. Psiquiatria.com

DEMANDAS SOCIALES DEL CUIDADO DE LA SALUD: ¿QUÉ NOS INDICA EL
COMPORTAMIENTO DE LA MUJER FRENTE AL HIV/sida?

difícil es hallar los modos de llegar a ellos, pues los intentos se sostuvieron más en campañas,
y acciones de información que de educación. Los resultados negativos de esos esfuerzos nos
colocan en la necesidad de aceptar que el camino es la educación para la salud. Esta a su vez
requiere desarrollar la didáctica específica de la educación para la salud hasta niveles que nos
permitan articular la teoría de la enseñanza con las prácticas educativas.
Parece por tanto congruente pensar que la educación, sobre todo de los menores de 25 años,
que son el grupo más susceptible, encuentre la clave para reducir la propagación. Pero ¿qué
nos está indicando el aumento del índice, a pesar de los múltiples intentos que se lanzaron a
más de una década para disminuirlo, tanto a nivel mundial como regional y en nuestro país?
Quizá es tiempo de reflexionar que las campañas sostenidas en la información y aun las que
logran la comunicación requieren ser evaluadas desde una actitud científica, esto es,
ejerciendo registro sobre nuestros deseos, miedos, negaciones y otros componentes.
Es necesario un estudio que de luz

sobre cómo estos influyen en

comportamientos y la

perseverancia de modalidades, que de una manera muy manifiesta se nos presentan como
obstáculos, o al menos como insuficientes, para lograr la disminución del riesgo. Esto coloca al
educador, formal o informal, en un alto nivel de responsabilidad como protagonista de
acciones de educación para la prevención.
Pero ¿qué ocurre en la práctica educativa? Nuestros estudios van mostrando que la falta de
formación específica de los docentes hace que los contenidos de la educación para la salud y
particularmente los de educación sexual, más que trabajarse de manera transversal e
interdisciplinariamente como es recomendable, se diluyen en los diseños de los

programas

institucionales pero no se desarrollan en acciones educativas. Esto indica la dificultad de
aceptar el compromiso de todos los docentes del sistema frente a esta problemática.
El estado actual del tema nos exige algunas consideraciones acerca de

la educación como

modo de prevención. Es necesario la construcción de un modelo de análisis y de evaluación
comunicable, con referencia específica a estas cuestiones. Desde nuestro trabajo se desprende
que sólo parece posible esa construcción si se desarrollan investigaciones en el área de
educación para la salud, estratégica y orientada a problemas específicos, que permitan
intervenir en problemas de la práctica educativa y de salud.
No obstante las dificultades, hay consenso en algunos criterios y principios que podríamos
sintetizar del siguiente modo:


La educación es la actividad humana, capaz de generar acciones de prevención, cuando
esta requiere generación y modificaciones de comportamiento sostenidos en normas
culturales.

II Congreso Virtual Internacional de Psicología
http://congresopsicologia.psiquiatria.com - marzo 2018. Psiquiatria.com

DEMANDAS SOCIALES DEL CUIDADO DE LA SALUD: ¿QUÉ NOS INDICA EL
COMPORTAMIENTO DE LA MUJER FRENTE AL HIV/sida?



En este campo, la educación no debe limitarse ni a etapas, modalidades o restricciones
de ningún tipo. Debe extenderse a ámbitos formales y no formales, así como apelar a
todas las alternativas apropiadas que sean necesarias aplicar.



Requiere integrar los aportes, perspectivas y enfoques de diferentes disciplinas
científicas, interpretadas de modo tal que dicha integración permita una mejor
comprensión de los fenómenos educativos.



Es necesaria una real tarea trasdisciplinar que construya un modelo capaz de superar
las reducciones a las que dan lugar la acumulación de aportes disciplinares. Por medio
del desarrollo de la investigación educativa se busca sostener las propuestas de
innovaciones educativas para intervenir positivamente en esta problemática.

Para lograr que el sistema educativo logre esos objetivos se requieren docentes preparados,
capaces de

asumir este desafío, e instituciones educativas que avalen las acciones de

intervención educativa, proporcionando los medios y las condiciones

para orientar su

realización.
La escuela, como institución social históricamente reconocida, condensa distintas demandas
sociales, constituyéndose en uno de los medios más efectivos para lograr el cambio de
comportamientos. Es por ello que toda institución educativa debiera ser un ámbito de
prevención, generadora de actitudes sociales saludables y a la vez dinamizadora de las
relaciones que se establecen entre la familia y la comunidad en general. Sin embargo, el
análisis de los Planes de Estudio de la Formación Docente Argentina en los últimos 20 años y
de los Contenidos establecidos a partir de las Leyes de Educación y Salud Reproductiva no
manifiesta una tendencia en ese sentido. Por el contrario la Educación para la Salud no está
contemplada en la propuesta de la Formación Docente más que esporádicamente, y sólo se
proporcionan orientaciones didácticas para su abordaje a través de los temas transversales y
en los espacios de salud no se han implementado acciones de prevención en este sentido, de
manera general.
No dejamos de considerar la importancia de su inclusión como tema transversal, ya que
pensamos que la temática de la educación para la salud, implica adherirse necesariamente a
un enfoque pluri o multidisciplinario. Su complejidad requiere un tratamiento, como problema
común a varias disciplinas que aporten a la dimensión pedagógico-didáctica.
Es por lo expuesto hasta aquí que nuestro trabajo, encuadrado dentro del marco disciplinario
de la educación para la salud, busca producir cambios en los modos de comportamiento para
mejorar las condiciones de vida de las mujeres mediante el diseño de estrategias educativas
preventivas que generen la educación participante y permanente orientadas al autocuidado y

II Congreso Virtual Internacional de Psicología
http://congresopsicologia.psiquiatria.com - marzo 2018. Psiquiatria.com

DEMANDAS SOCIALES DEL CUIDADO DE LA SALUD: ¿QUÉ NOS INDICA EL
COMPORTAMIENTO DE LA MUJER FRENTE AL HIV/sida?

bienestar. Camino más arduo que la mera información pero que muestra ser el único capaz de
generar cambios en las personas y su medio.
No obstante, para lograr que estas estrategias sean las adecuadas, debe necesariamente
establecerse un diagnóstico de situación con respecto a los modos de comportamiento. Es
amplia la literatura que reportan estudios de este tipo en distintos países. En Argentina, los
estudios de opiniones y actitudes con relación al SIDA, en muestras poblacionales urbanas de
hombres y mujeres entre 15 y 50 años, revelan

que solo un mínimo porcentaje manifestó

cambios de conducta ante la infección por VIH/SIDA.
El avance de las enfermedades propias de esta era, requiere se multipliquen los esfuerzos para
educar a la población en la prevención y en la promoción de conductas y actitudes saludables.
En este sentido, es un hecho que no admite discusión la necesidad de la formación de futuros
ciudadanos responsables de sus actos, conscientes y conocedores de los riesgos, activos y
solidarios para conquistar el bienestar de la sociedad, crítico y exigente frente a quienes toman
las decisiones políticas que nos involucran a todos.
Esta problemática requiere un tipo de aproximación en el ámbito de la educación y la salud,
para fomentar el acercamiento a mejores condiciones para la prevención.

La innegable

urgencia de esta cuestión se pone de manifiesto, más aun en este momento, en los registros
del aumento constante de situaciones de riesgo y de pérdida de la salud de vastos sectores en
todo el mundo, pero sobre todo en comunidades pluriculturales, con otras necesidades básicas
insatisfechas y expuestas a múltiples efectos nocivos de su contexto tales como el aumento
de la pobreza, el desarraigo cultural, la desnutrición, la ruptura de sus modos culturales de
sostén como la pérdida de los vínculos solidarios, medios confiables, posibilidad el
reconocimiento de las necesidades de los pares, permanente pérdida de la autoestima y
soledad, que generan sentimientos de minusvalía e incomunicación.
Vista esta problemática desde esta dimensión pedagógica nos resultó de interés evaluar la
incidencia de la información sobre los modos de comportamiento de las mujeres frente al SIDA
en

grupos

poblacionales

de

características

socioculturales

diferentes

entre

sí,

fundamentalmente por el hecho de que la mujer se caracteriza por un menor poder de decisión
en la pareja como una constante, a pesar de las especificidades de los distintos grupos.
La Metodología que utilizamos se inscribe en

la investigación educativa de técnicas:

cualicuantitativa, aplicadas. Se analizaron propuestas a nivel Nacional, Provincial, Municipal y
de ONGs; datos epidemiológicos. Se fundamenta en el trabajo interdisciplinario. Intenta
generar trabajos originales para adquirir nuevos conocimientos, fundamentalmente dirigidos
a: Incidir positivamente en la educación para la salud, a través de la investigación

II Congreso Virtual Internacional de Psicología
http://congresopsicologia.psiquiatria.com - marzo 2018. Psiquiatria.com

de la

DEMANDAS SOCIALES DEL CUIDADO DE LA SALUD: ¿QUÉ NOS INDICA EL
COMPORTAMIENTO DE LA MUJER FRENTE AL HIV/sida?

formación pedagógica de

los equipos de salud y educación, para desarrollar el rol

de

educadores, formales y no formales, de acuerdo a las demandas sociales emergentes.
Propone el análisis de las interrelaciones entre la formación de los docentes y miembros del
equipo de salud, vinculados a la educación sexual, los mandatos de la ley, las acciones de
Formación Pedagógica implementadas por diferentes instituciones

y las necesidades de

formación que las de las problemáticas exigen.

De los resultados obtenidos
Adolescentes y jóvenes universitarios y las campañas actuales de prevención
Los requerimientos espontáneos con el fin de mejorar las campañas cubrieron aspectos cuali y
cuantitativos. Lo más solicitado estuvo relacionado a la mayor difusión de las campañas
(42.4%. Este requerimiento incluye la extensión de la difusión a todas las instituciones
educativas, con énfasis en el nivel primario, así como también la extensión de la misma a las
áreas de nivel socioeconómico culturales más desprotegidas. Hubo diferencia significativa (p <
0.005) entre ambos sexos, siendo mayor la población femenina.
El segundo requerimiento en importancia está relacionado a la motivación e inducción a la
concientización (27.9%). Los adolescentes y jóvenes piden mensajes "que lleguen a la gente",
que los haga tomar conciencia", lo que sugiere la necesidad por parte de los mismos de que
sea el adulto el que asuma la responsabilidad de la concientización.
La solicitud de mayor información ocupó el tercer lugar dentro de los requerimientos
espontáneos (17.0%), aunque no se explicitó si la información requerida está relacionada al
mayor conocimiento de la enfermedad o a las medidas preventivas. No hubo diferencia
significativa entre los sexos.
También se requirieron mensajes crudos y directos (11.2%), solicitándolo por igual hombres y
mujeres. Si bien no hubo diferencias significativas en cada requerimiento entre ambos sexos
(a excepción de la solicitud de mayor difusión), el porcentaje de mujeres fue generalmente
mayor que el de los hombres, a excepción de la solicitud de mensajes directos y el pedido de
no discriminar.
Cabe destacar que hubo requerimientos que sólo se expresaron en los jóvenes universitarios,
tales como mayores recursos, mayor interacción con la gente y la inclusión de enfermos en las

II Congreso Virtual Internacional de Psicología
http://congresopsicologia.psiquiatria.com - marzo 2018. Psiquiatria.com

DEMANDAS SOCIALES DEL CUIDADO DE LA SALUD: ¿QUÉ NOS INDICA EL
COMPORTAMIENTO DE LA MUJER FRENTE AL HIV/sida?

campañas. Por otro lado, sólo en los adolescentes de los colegios secundarios se solicitó no
asociar las campañas al miedo.
En cuanto a los requerimientos espontáneos también se observaron diferencias significativas
entre ambos sexos en la población de 18 años y más con relación a la mayor información y
mayor difusión, siendo nuevamente las mujeres quienes más lo requirieron.
En conclusión, los resultados obtenidos demuestran una gran disconformidad de los
adolescentes y jóvenes con las campañas de prevención. Asimismo, los requerimientos
espontáneos se presentan con características y jerarquías diferentes según la edad y sexo de
la población, lo que sugiere la necesidad de crear vías alternativas de educación preventiva
acordes con la edad y sexo de la misma.

Población del equipo de salud
Los medios masivos de comunicación fue la fuente de formación más mencionada, seguida de
fuentes relacionadas a la profesión, como son los médicos, el material impreso, las
conferencias y los profesores.
Actitudes y Opiniones frente al SIDA:
El reconocimiento de las situaciones de riesgo por parte de la población entrevistada estuvo
acorde con los conocimientos adquiridos. Se observó diferencia de género con respecto al
riesgo de la lactancia a cargo de una madre enferma, siendo las mujeres quienes más
reconocen esta situación (p < 0.04).


Percepción del riesgo, necesidad de contención o protección: Más de la mitad de la
población entrevistada reportó haber tenido cambios en su conducta sexual luego de
conocer acerca del SIDA. Un porcentaje que superó el 75% se consideró en riesgo.
Analizada esta situación según ocupación, el personal de enfermería fue el que más
percibió el riesgo, seguido por los profesionales. La profesión fue la causa más
importante (65 - 70%). Ante la pregunta sobre si se realizarían una prueba de
detección del virus, más del 85% respondió afirmativamente. Sin embargo, la profesión
ya no figuró como la causa más importante sino que fue la seguridad el motivo
prevalente. La importancia de la seguridad como causa de la realización de la prueba de
detección del HIV se reflejó nuevamente en aquellos individuos que ya se habían
realizado la prueba (27% de las mujeres y 31% de los hombres).
Es importante destacar que aunque la población en estudio demostró poseer muy buen
nivel de información, más del 90% de la misma refirió desear más información.

II Congreso Virtual Internacional de Psicología
http://congresopsicologia.psiquiatria.com - marzo 2018. Psiquiatria.com

DEMANDAS SOCIALES DEL CUIDADO DE LA SALUD: ¿QUÉ NOS INDICA EL
COMPORTAMIENTO DE LA MUJER FRENTE AL HIV/sida?

No hubo diferencias significativas de género con relación a la percepción del riesgo y el
grado de preocupación por el tema.


Prácticas y actitudes con respecto a la conducta sexual: A pesar de que la vía de
transmisión sexual de la enfermedad fue reconocida por casi la totalidad de los
entrevistados, los conocimientos específicos relacionados a las medidas preventivas en
esta vía de transmisión no estuvieron acordes al grado de información académica
respectivamente.

El análisis de los resultados obtenidos nos permite identificar varias instancias, a saber:


Disociación entre el nivel de información académica y el nivel de información
relacionada a la prevención de la transmisión del virus por la vía sexual: este aspecto
se ve reflejado en la falta de conocimientos específicos relacionados al preservativo
(requisitos para un preservativo eficaz, momento de colocación, circunstancias en las
que debe ser utilizado, etc.) en una población con un nivel de información académica
que permite el manejo adecuado de las medidas preventivas.



Disociación entre el discurso informativo y el comportamiento preventivo individual
relacionado con la sexualidad: si bien existe coherencia entre la información y el
comportamiento preventivo relacionado a la práctica profesional (Ej.: utilizar guantes
en individuos que sangran, solicitar información sobre esterilización de material
quirúrgico, etc.) es clara la disociación con respecto a la conducta sexual.
La discrepancia evidente entre la información que maneja el personal de salud y sus
modos de comportamiento individual se puede explicar a partir de las diferencias entre
el aprendizaje de conceptos (información) y el aprendizaje de conductas y modos de
comportamiento.



La información es incorporada por los sujetos como nivel simbólico de la representación
de la realidad. Existen ciertas reglas que hacen que la información adopte la forma de
discurso. Estas reglas provienen de la lógica y la lingüística y son las que exigen
coherencia interna y correspondencia externa para validar la información.
Si bien el nivel discursivo es una parte integrante de los modos de comportamiento
desarrollados por los sujetos, es necesario considerar que no existe una coherencia
interna explícita necesaria entre todas las formas de manifestación de un modo de
comportamiento, es decir, no necesariamente el discurso de un sujeto se corresponde
con sus prácticas con relación a una realidad aludida.
En este sentido la información pierde todo su valor como aprendizaje, así la información
verbalizable actúa muchas veces como una forma de racionalización que enmascara las

II Congreso Virtual Internacional de Psicología
http://congresopsicologia.psiquiatria.com - marzo 2018. Psiquiatria.com

DEMANDAS SOCIALES DEL CUIDADO DE LA SALUD: ¿QUÉ NOS INDICA EL
COMPORTAMIENTO DE LA MUJER FRENTE AL HIV/sida?

limitaciones de los sujetos expertos (léase personal de salud) para desarrollar un
cambio de actitudes.
Cuando hablamos de actitudes nos referimos a un estado interno que influye la
selección de la actividad individual realizada por la persona. Se considera que las
actitudes constan de componentes afectivos, aspectos cognoscitivos y consecuentes
conductuales. Es aquí donde planteamos la posible explicación de la discrepancia: la
diferencia entre la información que maneja el personal de salud y sus modos de
comportamiento se produce porque el componente afectivo de las actitudes permanece
estable a pesar de la incorporación de la información.
En este sentido, el aprendizaje debe partir de concebir al individuo como un todo
armónico.

Cuando

hablamos

de

aprendizaje

debemos

tener

en

cuenta

tres

dimensiones: los aprendizajes teoréticos, los aprendizajes sociales y los aprendizajes
prácticos. Si bien esta afirmación puede parecer contradictoria, no lo es en
consideración a los resultados obtenidos de esta investigación. El manejo de
conocimientos académicos del personal de salud nos demuestra una hipertrofia de la
dimensión teórica del aprendizaje (información), provocando una disociación respecto al
aprendizaje práctico y social que son los que determinan, en última instancia, los
comportamientos. Esto es particularmente riesgoso en esta población si consideramos
que para el imaginario social, el personal de salud constituye el mejor modelo para
desarrollar aprendizajes relativos a la adquisición de medidas preventivas. Al ser éste el
referente de la comunidad se multiplica entonces, el efecto de la disociación entre las
dimensiones del aprendizaje.


Diferencias de género con respecto al comportamiento sexual: si bien no hubo
diferencias significativas importantes entre ambos sexos con respecto al conocimiento
académico,

éstas

aparecen

claramente

cuando

se

analiza

el

comportamiento

relacionado a la, sexualidad. La mujer parece conocer menos sobre el preservativo, y si
bien puede influir en su pareja con respecto a su uso, el hecho de que no participe
activamente en la provisión del mismo sugiere que este rol específico está delegado en
el hombre, dándole de esta manera mayor control de la situación en un hecho de
carácter interpersonal y disminuyendo así el poder de decisión de la mujer dentro de la
pareja.
Aquí vemos nuevamente la disociación entre el aprendizaje teorético y el aprendizaje
práctico y social, disociación agravada en este caso particular, por la estructura social
que afianza a la mujer en su rol tradicional dentro de la comunidad focalizado en la
maternidad y el trabajo doméstico. Actualmente las mujeres compiten con los hombres

II Congreso Virtual Internacional de Psicología
http://congresopsicologia.psiquiatria.com - marzo 2018. Psiquiatria.com

DEMANDAS SOCIALES DEL CUIDADO DE LA SALUD: ¿QUÉ NOS INDICA EL
COMPORTAMIENTO DE LA MUJER FRENTE AL HIV/sida?

en la dimensión académica. Sin embargo cuando se trata de aprendizajes sociales y
prácticos reñidos con la estructura social, éstos se dificultan.


Asociación con conductas de riesgo relacionadas al uso y abuso de drogas: existe cierta
similitud entre las opiniones acerca del poder de decisión de eliminar una conducta
nociva como es el consumo de drogas y la ausencia de medidas preventivas
relacionadas a la sexualidad. La expresión de estas opiniones y actitudes pudieran
reflejar conductas de autosuficiencia: "yo puedo" ó "a mí no me va a pasar".
Continuando
aprendizajes

dentro

de

sociales

este
se

marco

expresan

conceptual,
en

dos

observamos
manifestaciones

que

los

mismos

diferentes

del

comportamiento:


Sensación de omnipotencia del sujeto frente a la droga.



La situación de riesgo que siempre atañe a otro y no a uno mismo, aprendizajes estos
en los que el sujeto no está comprometido con su medio interno sino que se apoya en
los aprendizajes teoréticos que lo liberan del compromiso de estar incluido en las
mismas situaciones que los demás. Apoya esta afirmación el deseo de mayor
información expresado por los sujetos relevados. Esto se corresponde con el
pensamiento mágico de que la información brinda protección.

En conclusión nuestros resultados indican que la disociación entre los aprendizajes teoréticos y
los aprendizajes sociales y prácticos observados en el personal de salud aparece como un
elemento obstaculizador dentro del proceso de aprendizaje de la comunidad para acceder a
cambios en los modos de comportamiento hacia actitudes preventivas.
Sostenemos que es a través del hecho educativo armónico que la comunidad debe intentar que
estos diferentes niveles del aprendizaje encuentren el equilibrio necesario para que el
comportamiento sea adaptativo.
Población estudiantil
Conocimientos acerca del SIDA y otras enfermedades de transmisión sexual:
E1 análisis de los conocimientos acerca del SIDA reveló que la información que manejan es
muy buena en ambos sexos, principalmente aquella relacionada a las vías de transmisión,
edad en la que se transmite el virus, síntomas de la enfermedad, concepto de portador
sintomático e importancia de la presencia del virus en e1 contagio. El conocimiento de

la

mayoría (cerca del 90%) desconocía el período de ventana. En estos ítems no hubo diferencia
significativa de género.

II Congreso Virtual Internacional de Psicología
http://congresopsicologia.psiquiatria.com - marzo 2018. Psiquiatria.com

DEMANDAS SOCIALES DEL CUIDADO DE LA SALUD: ¿QUÉ NOS INDICA EL
COMPORTAMIENTO DE LA MUJER FRENTE AL HIV/sida?

Las fuentes de información reveladas fueron principalmente los medios masivos de
comunicación (MMC), seguido por los profesores y el material impreso.
Si comparamos estos datos con los obtenidos de la población del personal de salud
observamos que la diferencia en los conocimientos entre ambas poblaciones no es muy grande
(con la excepción del concepto de período de ventana), y que si bien los MMC aparecen como
primer referente de 1a información en ambos grupos, el resto de las fuentes son diferentes.
Con relación al conocimiento de otras enfermedades de transmisión sexual (ETS), cerca de1
80% conocía la sífilis y menos de la mitad tenía información sobre la blenorragia. Cerca de un
20% de los estudiantes reconocía la hepatitis B como ETS.
Conocimiento, actitudes y opiniones acerca de situaciones de riesgo y medidas preventivas
adecuadas:
El análisis de las actitudes con respecto al SIDA demostró que el 57% de los varones tuvo
cambios

en

su

conducta

luego

de

conocer

acerca

del

SIDA.

Este

porcentaje

fue

significativamente menor en las mujeres (27%, p < 0.0005). Más de1 70% se consideró en
riesgo de contagiarse el virus y la causa prevalente fue las situaciones de riesgo (cerca del
80% de los estudiantes), o sea situaciones que no dependen de ellos mismos. Las conductas
de riesgo se mencionaron como causa en menos del 30% de 1a población.
Actitudes prácticas y opiniones acerca de la sexualidad y el SIDA:
Con respecto a la actitud frente a la primera relación sexual, e1 60% de las mujeres habló del
tema SIDA con su pareja y ésta 1a tranquilizó. Este porcentaje fue significativamente menor
en 1os varones (42%, p < 0.05).
Prácticas, actitudes y opiniones acerca de la drogodependencia:
Con respecto a la relación que pudiera existir entre el alcohol, la droga y el SIDA, cerca del
40% comentaron que existe una relación entre ellos. No obstante, e1 50% reportó que la
relación sólo existe con la droga y no con el alcohol.
Discusión que generan estos datos:
El análisis de 1os datos obtenidos de las entrevistas semiestructuradas a los estudiantes nos
permite comentar, las siguientes inferencias:


Necesidad de contención ante situaciones angustiantes: esta actitud, que no se observa
en el equipo de salud, aparece como una característica obligada en la población
adolescente y se expresa en la búsqueda continua de los padres como referentes de
información y de contención. También se observa notoriamente cuando se les solicita el

II Congreso Virtual Internacional de Psicología
http://congresopsicologia.psiquiatria.com - marzo 2018. Psiquiatria.com

DEMANDAS SOCIALES DEL CUIDADO DE LA SALUD: ¿QUÉ NOS INDICA EL
COMPORTAMIENTO DE LA MUJER FRENTE AL HIV/sida?

motivo por el cual comentarían si son HIV positivos, pues la ayuda aparece como una
razón muy importante (30% de los adolescentes).


Necesidad de asegurarse que no son portadores de la enfermedad: que se refleja en las
opiniones acerca de las medidas preventivas, donde se refiere frecuentemente la
importancia de concurrir periódicamente al médico o realizarse pruebas de detección
del HIV de manera periódica. El motivo "SEGURIDAD" vuelve a aparecer cuando se les
pregunta la causa por las cuales se realizarían una prueba de HIV Esta necesidad de
seguridad también se observa en el personal del equipo de salud y no se correlaciona
adecuadamente con el nivel de información que poseen.



Importancia del papel de los padres en temas relacionados al SIDA, sexualidad y
drogadependencia: llama la atención que los padres ocupen un papel preponderante
como informantes, ya que en esta etapa particular de la vida el adolescente tiende a
romper sus lazos con los padres para poder así identificarse como persona única y
adulta.

Los

cambios

sociales

de

los

últimos

años

que

han

favorecido

la

desestructuración familiar y permitido mayor flexibilidad en los roles dentro del núcleo
primario, quizás sean en parte la respuesta a esta situación, ya que el adolescente no
puede "romper" lazos que no estén previamente bien definidos. La pareja todavía, no
juega un rol importante, ya que no aparece prácticamente como referente de
contención o comunicación.


Disociación entre el aprendizaje "teórico" y el aprendizaje "práctico": Si bien existe un
muy buen manejo de la información con respecto a las vías de transmisión del SIDA,
sus síntomas y tratamiento, conceptos de portador sintomático o presencia del virus en
el contagio, etc., se observa una importante falencia con respecto a los conocimientos
prácticos acerca del uso del preservativo. Esta disociación puede deberse quizás a la
falta de información específica (temas tabúes) o el rechazo a los cambios de conductas
sexuales como modos de prevención.



Cambio social con respecto al comportamiento sexual: en este ítem en particular se
observaron grandes diferencias con relación a la conducta sexual, si se compara con el
comportamiento del personal del equipo de salud: casi la mitad de los adolescentes
reportaron una vida sexual activa, lo que indica un comienzo más temprano de las
relaciones sexuales. También se observó que la primera relación sexual fue planeada en
un importante porcentaje de estudiante y compartido con una pareja que también
experimentaba por primera vez. Por otro lado se observó que un bajo porcentaje de la
población

reportaba

más

de

un

compañero

sexual

durante

el

último

año,

paradójicamente, en una etapa de la vida donde la búsqueda de compañeros se
acentúa y el concepto de tiempo de permanencia en una relación sentimental es muy
II Congreso Virtual Internacional de Psicología
http://congresopsicologia.psiquiatria.com - marzo 2018. Psiquiatria.com

Comentarios/ Valoraciones de los usuarios



¡Se el primero en comentar!