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Trastornos de la conducta alimentaria en varones.

Autor/autores: Miguel Ángel Quintanilla , Estela Viñuales, Ana Barrera, Miren Edurne García, Patricia Gracia García, Isabel Jiménez, José Ignacio Latorre
Fecha Publicación: 17/05/2010
Área temática: Psiquiatría general .
Tipo de trabajo:  Artículo de revisión

RESUMEN

La anorexia nerviosa es una enfermedad de la conducta alimentaria que adquiere relevancia desde hace unas décadas. Se trata de una enfermedad cuyo comienzo se sitúa fundamentalmente en la adolescencia y que afecta fundamentalmente a mujeres. La presencia en varones hasta hace relativamente poco tiempo se valoraba como anecdótica. Afortunadamente contamos poco a poco con estudios que valoran su presencia y sus características clínicas. En esta conferencia estudiamos los trastornos de la conducta alimentaria que acuden a una unidad específica de referencia para estas patologías en la Comunidad Autónoma de Aragón, hacemos referencia a los varones que solicitan atención en dicha unidad a lo largo de un año. Mostramos como ejemplo dos casos de varones con anorexia nerviosa restrictiva. Discutimos los hallazgos a la luz de otros estudios de la bibliografía.

Palabras clave: anorexia


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Trastornos de la conducta alimentaria en varones.
FUENTE: PSIQUIATRIA.COM. 2008; 12 (2)

Miguel Angel Quintanilla; Estela Viñuales; Ana Barrera; Miren Edurne García; Patricia Gracia García;
Isabel Jimenez; Jose Ignacio Latorre.
Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa y Hospital Royo Villanova de Zaragoza

Resumen
La anorexia nerviosa es una enfermedad de la conducta alimentaria que adquiere relevancia desde hace unas
décadas. Se trata de una enfermedad cuyo comienzo se sitúa fundamentalmente en la adolescencia y que afecta
fundamentalmente a mujeres. La presencia en varones hasta hace relativamente poco tiempo se valoraba como
anecdótica. Afortunadamente contamos poco a poco con estudios que valoran su presencia y sus características
clínicas. En esta conferencia estudiamos los trastornos de la conducta alimentaria que acuden a una unidad
específica de referencia para estas patologías en la Comunidad Autónoma de Aragón, hacemos referencia a los
varones que solicitan atención en dicha unidad a lo largo de un año. Mostramos como ejemplo dos casos de
varones con anorexia nerviosa restrictiva. Discutimos los hallazgos a la luz de otros estudios de la bibliografía.

Introducción
Cuando hablamos de anorexia nerviosa, automáticamente pensamos en chicas o mujeres jóvenes. Sin embargo los
profesionales con experiencia en este terreno conocen a más de un varón que presenta estos trastornos. Los
varones eran los grandes olvidados en la bibliografía al respecto. Afortunadamente los estudios epidemiológicos
comunitarios incluyen en la actualidad también a la población masculina. La información referente a pautas de
tratamiento o resultados en varones sigue siendo escasa.

Algunas pinceladas sobre trastornos de la conducta alimentaria en varones: (Serna de la, 2001)
Epidemiología:
Prevalencia de trastornos de la conducta alimentaria en varones respecto a mujeres:
Anorexia: 8-10%
Bulimia: posiblemente mayor frecuencia. Datos poco fiables, escasos en series clínicas, posible síndrome oculto.
Obesidad: prevalencia similar en varones y mujeres, la prevalencia es mayor en mujeres a partir de la
menopausia.
Parece existir un inicio más precoz en varones.
Etiología
Problemas de identidad sexual (la edad de mayor riesgo coincide con la adolescencia) Homosexualidad: los
varones homosexuales tendrían mayor preocupación por el esquema corporal, una mayor insatisfacción por la
figura y el peso incrementaría la vulnerabilidad por los TCA. Sin embargo los sucesivos estudios discrepan entre si.
Actualmente se habla más de "alexitimia sexual": dificultad para sentir expresar emociones o comunicar
sentimientos en todo lo referente a la sexualidad, lo que derivaría en una indiferencia hacia lo sexual. Como en las
mujeres, la actividad sexual es uno de los aspectos que más tarde se normalizan, después de lo alimentario, lo
afectivo o las relaciones interpersonales.
Sintomatología:
Rasgos de personalidad: En varones se encuentran más rasgos obsesivos, esquizoides psicopáticos. En los varones
se encuentra más alteraciones de la actividad física. Presentan con más frecuencia la hiperactividad como

mecanismo compensador de la posible ganancia de peso. Se han descrito incluso síndromes consistentes en
ejercicio patológico (síndrome del corredor compulsivo, vigorexia).
Evolución y pronóstico
Factores de mal pronóstico:
Inicio tardía
Larga duración de la enfermedad
Malas relaciones familiares
Ausencia de fantasías sexuales

Diferencias en los trastornos de la conducta alimentaria entre varones y mujeres (Serna de la,
2001)

Factores de riesgo
Los estudios de factores de riesgo de trastornos de la alimentación actualmente incluyen también a la población
masculina. Los varones están expuestos a factores psicológicos y biológicos de riesgo. Algunos de los factores de
riesgo, que afectan también a varones, incluyen el deseo de estar más delgado, el miedo a convertirse en obeso,
la conductas de someterse a dietas de adelgazamiento, la relación entre ganancia de peso y deseo de estar más
delgado.
La insatisfacción corporal parece ser menor en varones. La mayoría de los estudios encuentran mayores tasas de
insatisfacción corporal y deseo de adelgazar en mujeres. Los chicos son menos precisos a la hora identificarse con
un determinado dibujo de silueta corporal, está menos presente en ellos el deseo de ser más delgado, de hecho,
desean con más frecuencia ser más grandes físicamente. Aunque no es exclusiva del género masculino, el deseo
de estar más musculado es más propio del varón. Existe un mayor riesgo en los varones de uso inadecuado de
esteriodes anabolizantes. Estas diferencias de género son consistentes entre los diferentes estudios. La
preocupación por el peso se incrementa con la edad, aunque este fenómeno está menos marcado en los varones.
Una conducta de riesgo para desarrollar trastornos de alimentación como es "estar a dieta" está menos presente
en varones que en mujeres. Estas diferencias son menos llamativas en edades tempranas donde la prevalencia de
sujetos intentando controlar el peso por medio de restricciones alimentarias son similares, la dietas en edades
tempranas están inducidas en ocasiones por los padres.
La relación entre abusos y trastornos de alimentación está presente en los varones. Se han relacionado
experiencias de abuso físico y experiencias de abuso sexual con trastornos de la conducta alimentaria y con
conductas relacionadas como abuso de laxantes o pastillas adelgazantes, vómitos autoinducidos y atracones. Se
ha relacionado antecedentes de abuso sexual con mayor presencia de trastornos de alimentación y experiencias
actuales de violencia u otras ofensas con conductas de purga y atracones.

Se han descrito factores biológicos como cambios adrenales y gonadales relacionados con la pubertad. Estos
cambios modifican la morfología corporal, el peso, la talla, el índice de masa corporal, estos cambios son
experimentados de diferente manera por los individuos de distinto género.
Un modelo de desarrollo de enfermedad no está completo si no incluimos factores sistémicos que influyan en el
desarrollo del individuo. Algunos estudios asocian problemas alimentarios con percepciones de bajos niveles de
comunicación familiar o déficits de cuidado parental. Algunos factores de los padres o de los compañeros se han
relacionado con mayores puntuaciones en rasgos psicopatológicos de trastornos de alimentación. Los padres, los
compañeros y los medios de comunicación influyen en el deseo de perder peso. Aunque esto último no se ha visto
confirmado en algún otro estudio.

Prevalencia
En los estudios de prevalencia se encuentran siempre tasas más altas de trastornos de alimentación y su
diferentes subtipos (anorexia nerviosa, bulimia nerviosa u trastornos de la conducta alimentaria no especificadas)
en mujeres que en varones. Sin embargo las prevalencias y las proporciones entre géneros varían mucho de unos
estudios a otros.
Contamos con algún estudio en nuestro medio: Ruiz y colaboradores estudiaron en 1997 la prevalencia de TCA
entre los adolescentes escolarizados de Zaragoza mediante un estudio epidemiológico en una muestra
representativa de 4.047 sujetos. La población con riesgo para TCA en mujeres y varones adolescentes
escolarizados zaragozanos es semejante a la encontrada en otros países desarrollados y en otras poblaciones
españolas. La población con riesgo para TCA, definida por una puntuación igual o mayor al punto de corte 30 del
EAT-40, estimada fue de 16,32% en las mujeres y del 3,3% en los adolescentes varones. Existen diferencias
significativas genéricas respecto a la prevalencia de la población "con riesgo" entre las mujeres y los varones
adolescentes zaragozanos (casi cinco veces más en el caso de las mujeres) (Ruiz 1998).
En muestra clínica, en la Unidad de Psiquiatría Infanto-Juvenil del Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa de
Zaragoza hasta 1997 existía una proporción mujer/varón de 9 a 1 en los casos de TCA atendidos (Bueno,1999).

Psicopatología y diagnóstico
Los estudios no suelen desarrollar descriptivamente la psicopatología del trastorno de alimentación, útiles para
diferenciar los casos si existieran diferencias de género. Algunos instrumentos de medida han incluido algún ítem
más propio de pacientes varones con escalas de "imagen muscular".

Pronóstico y tratamiento
En los tratados donde se describen los tratamientos para los trastornos de alimentación no aparecen
recomendaciones diferenciales según el género. No existen estudios de eficacia en población masculina. Algunos
autores realizan pequeñas sugerencias a la hora de adaptar el abordaje de estos trastornos en los varones, que
debe incluir la orientación y el funcionamiento sexual. Existen algunas dificultades a la hora del funcionamiento de
los varones en los grupos de terapia que incluyen una mayoría de pacientes mujeres. Se puede hacer alguna
consideración acerca del género del terapeuta que atiende estos pacientes.

Unidad de trastornos de la conducta alimentaria para adultos del hospital Royo Villanova de Zaragoza
Objetivos: La unidad tiene como objetivo el atender los pacientes de edad adulta con trastorno de la conducta
alimentaria (anorexia, bulimia, otros TCA) que requieran atención en una atención especializada.
Área: abarca todos los sectores de Zaragoza capital y provincia.
Derivaciones: los pacientes provienen fundamentalmente de los centro de salud mental, de la unidad de TCA
infantojuvenil del hospital clínico y de los médicos de atención primaria.
Estructura y organización:
Para el abordaje consta de un equipo interdisciplinar que consta de psiquiatra, psicólogo, enfermería en salud
mental y dietista. La acogida de nuevos pacientes se desarrolla con una "entrevista de acogida" en la que se
realiza una primera evaluación psiquiátrica, posteriormente se realiza la "Encuesta nutricional" por medio de

entrevista de enfermería especializada y una "evaluación psicológica". Posteriormente existe una reunión de
equipo donde se proyecta el Plan terapéutico.
El abordaje de los pacientes se desarrolla tanto de manera de manera individual como grupal, en medios que se
estructuran según gravedad y necesidad de intensidad del tratamiento en: Consulta externa/ Unidad de
Hospitalización /Hospital de día
Durante los años 2003 y 2004 se atendieron 286 pacientes nuevos con la siguiente distribución por diagnóstico y
relación varón-mujer.
Anorexia: 3-58 (4,9%)
Bulimia: 2-57 (3,4%)
Trastorno por atracón: 2-43 (4,4%)
Trastornos no especificados: 3-33 (8,3%)
Cirugia bariátrica: 10-42 (19,2%)
Obesidad: 3-30 ( 9,1%)
Ejemplarizamos dos pacientes varones de inicio de anorexia nerviosa en edad adulta.

Casos clínicos
Caso 1
Varón de 29 años. Remitido a la unidad de trastornos de la conducta alimentaria desde su centro de salud mental.
Por posible anorexia nerviosa con repercusiones físicas y dificultades de mejora ambulatoria.
Enfermedad actual:
Peso habitual 90-100. Cogió algo de peso por apetencia por dulces, poca actividad física ( hasta 106 kgs).(IMC 3436). Inicia dieta de adelgazamiento hace 1,5-2 años. Restricción alimentaria cuantitativa y cualitativa. Pérdida de
peso progresiva 106 a 47 kgs (IMC 36-16) en 1,5 años. Coincide con dieta-emanciación de la madre debido a
enfermedad médica (cirrosis). Sometida a trasplante hepático con éxito. Por consejo de su MAP intenta normalizar
ingestas y estabilizar peso. No es capaz, cuando come le sienta mal, no tiene apetito... Tiene un ingreso en
Medicina Interna-Endocrinología en hospital comarcal para evaluación y estabilización de estado físico
(hipotensión, bradicardia, hipoglucemia...). Se remite a CSM. De allí ante el bajo peso y las dificultades de
repuesta inicial lo remiten a la UTCA del HRV.
Núcleo de convivencia/Antecedentes familiares:
Vive con sus padres, su hermano y la novia de este. Padre 59 años, mecánico. Madre 56 años, ama de casa.
Hermano 34 años empleado de fábrica.
No antecedentes psiquiátricos familiares.
Antecedentes personales:
Embarazo y parto normal. Desarrollo psicomotor normal. Infancia "buena" Escolarización: sociable, rendimiento
normal. Estudios FP1-administrativo hasta los 16 años Actividad laboral: empleado de gasolinera 12 años. Dice
estar "satisfecho" de su trabajo.
Relaciones afectivas: Nunca pareja estable "algún rollo". Amistades: Sale poco. Su grupo de amigos se ha ido
haciendo mayor en edad y ahora salen menos por haberse casado o por trabajo.
Personalidad premórbida: Se define como tímido, también como obstinado.
Sin antecedentes médicos de interés. No alergias. No IQ Hábitos tóxicos: tabaco (1 paq/día). No otros.
Sintomatología actual y exploración psicopatológica:

Entrevista de acogida. Visita de 1º día. Evaluación psiquiátrica. Había tenido un ingreso reciente en medicina
interna por repercusiones físicas de su desnutrición, hipotensión, bradicardia, hipoglucemia... Había iniciado
recuperación ponderal. Peso 60 Kgs (IMC 20,5). Tolera la recuperación de peso, aceptaría seguir subiendo ( hasta
unos 70 Kgs...). Refiere verse delgado. Niega deseos de delgadez. Realiza adecuada crítica, pero no sabe explicar
qué es lo que le impide comer.
Examen Mental:
Consciente, alerta, bien orientado auto y alopsiquicamente. Discurso espontáneo, fluido y coherente. No
alteraciones formales del pensamiento. No ideación delirante. No alteraciones sensoperceptivas. No aparece un
cuadro afectivo completo. Cansancio (por desnutrición), desánimo debido al largo proceso de enfermedad y la falta
de evolución favorable. No deseos de muerte ni ideación suicida. Pensamiento centrado en la comida y en el
cuerpo. No dismorfofobia, aparentemente no existe negativa a recuperar peso. Sueño conservado. Apetito alterado
(falta de..,).
Diagnóstico de trabajo inicial: Anorexia nerviosa restrictiva atípica. Análisis, ECG (quincenal por MAP), se remite a
encuesta de enfermería y evaluación psicológica "preferente". Se aconseja, suplementos nutricionales (Isosouurce
1/24h).
Encuesta de enfermería. Evaluación nutricional. Consultas de enfermería
1.- Valoración según Patrones Funcionales de Salud y Diagnósticos de Enfermería.
2.- Introducción a programa de educación para la Salud específico.
3.- Monitorización de conductas de riesgo identificadas. Revisión de curva de peso y constantes. Valorar con
posterioridad la adherencia terapeútica y resistencia al cambio. Establecer estrategias de intervención en consultas
sucesivas .
Exploración psicológica
I.D.E.D
E.A.T.-40: 34 (punto de corte 30)
B.I.T.E. (Escala síntomas: 7 escala de gravedad:1) (ausencia)
B.S.Q. : 58 (punto de corte 105)
B.D.I.: 18 (depresión leve)
Escala de autoestima (Rosenberg): 15 (baja autoestima)
Escala de creencias (Malouff-Schutte): (rumiación, baja tolerancia a la frustración)
Inventario de asertividad: cierta dificultad para afrontar las críticas de los demás y discrepar las opiniones de los
demás.
Cuestionarios de personalidad Inventario Multiaxial
Clínico de Millon (destacan rasgos obsesivos, dependientes y esquizoides)
Evolución:
Se evidencia unas fluctuaciones importantes de peso con subidas y bajadas de peso de hasta 8 kgs a la semana.
Se propone ingreso para facilitar la normalización de la ingesta y la estabilización del peso. Ingreso hospitalario 1
mes. Buena disposición, buen contacto emocional, cumplidor. Tras el ingreso pasa a Hospital de Día. Contrato
terapéutico inicial de 2 meses, se renueva por otros dos. Buena adaptación a las actividades grupales, mejora la
comunicación, aprende a expresar quejas,... Dificultades para alcanzar los objetivos de recuperación de peso
previstos, se estanca en IMC 18-19. Se integra en grupo semanal de anorexia. (Grupo cerrado de 8-12 pacientes
con un programa 9 mesesde sesiones semanales)
Abordaje farmacológico

Sin tratamiento farmacológico inicialmente. Se aconsejó venlafaxina en la evolución por sentimientos de vacío
existencial, desánimo, pensamientos de muerte sin planes ni gestos suicidas. Con escasa respuesta en lo
emocional. Se intentó asociar dosis bajas de risperidona que fue rechazado por el paciente por posible mala
tolerancia (mareos, hipotensión, edemas...).

Caso 2
Paciente varón de 24 años remitido a nuestra unidad con diagnóstico de trastorno esquizotípico de la personalidad
y anorexia nerviosa.
Enfermedad actual:
Hacia unos 4 años se independiza por mala relación con la pareja de su madre. Comienza a ganar peso
progresivamente. Peso habitual 80 Kgs. Alcanza los 100 Kgs. Hace unos 2 años inicia pautas para disminuir peso:
restricción intensa, actividad física y purgas (vómitos). Disminuye 40 Kgs en 1 año. Un ingresa previo en
psiquiatría:. Diagnóstico: trastorno esquizotípico. Cierta recuperación ponderal. En el momento de la derivación :
Tto: Vandral 75mg, Risperdal Consta 25. Peso 75 kgs (talla 1,86)
Núcleo de convivencia/Antecedentes familiares:
Es el mayor de 4 hermanos .Actualmente convive con su madre y sus tres hermanas Madre: edad media,
autónoma-comercio. Separada del padre, con el que tuvo tres hijos. Nueva relación posterior, con la que tuvo otro
hijo y que finaliza hace un par de años. Hermanas. La mayor trabaja de técnico sanitario. Las dos pequeñas
estudian. Padre empresario, vive en otra ciudad, tiene contactos esporádicos con él. Cuando van a visitarlo deben
dormir en una pensión por la que nueva paraje del padre prefiere que no vayan a casa.
Tuvo mala relación con la segunda pareja de su madre, a los 17-18 decidió independizarse y meterse en el
ejército. Ahora ha vuelto a vivir con su madre a causa de la enfermedad.
En principio se desconocen antecedentes psiquiátricos familiares.
Antecedentes personales:
Embarazo y parto normal. Problemas desarrollo: problemas de psicomotricidad y lenguaje. Escolarizado:
dificultades repite 2º y 7º. Obtiene el graduado escolar. No es capaz de seguir una FP, hace 2 años de Garantía
Social. Al venir a la unidad se encontraba preparándose el graduado en ESO. Actividad laboral: Soldado durante 6
años. "Jubilado" por enfermedad mental: "Trastorno específico de personalidad" discapacidad 30%.
Sin antecedentes médico-quirúrgicos de interés
Dice tener algún amigo, con los sale en ocasiones. No tiene, ni ha tenido novia. Refiere escaso interés sexual
desde la adolescencia. Afición a chatear por internet. Hace deporte de manera compulsiva.
Antecedentes Pisquiátricos:
Problemas escolares Problema con la separación de sus padres a los 12 años. A los 18 años también acude a salud
mental, por dificultades en la adaptación en el ejército. Refiere consumo espóradico de alcohol y otras sustancias
psicoactivas (cannabis, pastillas...)
Sintomatología actual y exploración psicopatológica:
Buen nivel de conciencia y orientación auto-alopsíquica. Discurso espontáneo, pobre, parco en palabras, poco
expresivo, mantiene cierto distanciamiento emocional, escaso contacto visual. No se identifican alteraciones del
curso del pensamiento. Contenido del pensamiento: Preocupación excesiva por el peso y la imagen corporal,
dismorfofobia; miedo excesivo a cometer errores en las relaciones sociales lo que lleva a conductas de evitación.
Presenta síntomas cognitivos característicos de anorexia nerviosa: vivencia corporal anómala, intensa tensión
asociada a la ingesta de alimentos. Estado de ánimo bajo, desilusionado, sensación de no llevar una vida
satisfactoria. Refiere un vacío existencial persistente, con poca iniciativa e ilusión por el futuro. Pensamientos
ocasionales de muerte, sin ideación suicida estructurada. Sueño: tendencia a quedarse por las noches en internet,
luego presenta sueño por el día. Alimentación restrictiva, algún episodio de purga, actividad física compulsiva
encaminada exclusivamente a control de peso. Al acudir a la unidad impresiona de impregnación neurológica.

Evolución:
Tras evaluación inicial, al evidenciar el paciente las dificultades de llevar una alimentación adecuada de manera
anbulatoria, por la intensa angustia que eso le genera por la posibilidad de ganar peso. Se decide tratamiento en
régimen de Hospital de Día.
En la evolución se realizan varios ingresos en hospitalización por, pérdidas de peso y tentativas autolesivas.
Adaptado al ingreso, cumple las normas, recuperación ponderal muy lenta (0,5 Kgs/ semana). Durante los
ingresos se procura no rompa con la actividad formativa que tenía, por lo que se autorizan salidas. Mantiene una
actitud de distanciamiento del resto de los pacientes, incluidas TCA. De manera espontánea mantiene un actitud
de aislamiento importante. Verbaliza cogniciones características de hipersensibilidad social
Actitud pasiva en el tratamiento, no presenta confrontación directa, aunque poco implicado en el cambio. Se
integra en grupo semanal de anorexia. (Grupo cerrado de 8-12 pacientes con un programa 9 mesesde sesiones
semanales) El contacto emocional mejora sustancialmente en situaciones en las que va cogiendo confianza
Abordaje farmacológico:
Se ajustó la dosis antidepresivo de 75 a 150 mg de venlafaxina. Se fue retirando el neuroléptico depot por posible
enlentecimiento. Episodios de inquietud y angustia asociados a: problemas con el peso y la comida, a pequeñas
frustraciones en el entorno familiar. Se valora asociar nuevamente neuroléptico: actualmente ziprasidona
80mg/día. Con cierta mejora en los niveles de ansiedad, pocos efectos sobre distorsiones cognitivas.

Bibliografía
-Bueno M, Velilla M, Sarría A, Guillén C, Jiménez A. Anorexia nerviosa. En: Bueno A, Sarría A, Pérez-González JM,
ed. Nutrición en Pediatría. Madrid: Ediciones Ergón; 1999. p. 311-319.
- McDermott B. Eating disorders in boys. In Jaffa T and McDermott Eating Disorders in Children and Adolescents.
Cambridge University Press 2007.
- Muise AM, Stein DG, Arbess G. Eating Disorders in Adolescent Boys: A review of adolescent and young adult
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-Robb AS. Dadson MJ. Eating disorders in males. Child Adolesc Psychiatric Clin N Am 2002;11:399-418.
- Ruiz PM, Alonso JP, Velilla JM, Lobo A, Martín A, Paumard C, Calvo AI. Estudio de prevalencia de trastornos de la
conducta alimentaria en adolescentes de Zaragoza. Revista de Psiquiatría Infanto-Juvenil 1998; 3: 148-162.
- Serna I de la. Capitulo 8 Trastornos de la conducta alimentaria en el varón. En García-Camba. Avances en
trastornos de la conducta alimentaria. Anorexia nerviosa, bulimia, obesidad.Ed Masson Barcelona 2001.

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