La clozapina fue el primer antipsicótico atípico aprobado por la FDA para el tratamiento de la esquizofrenia resistente. Sigue considerándose el “gold standard” para el tratamiento de la esquizofrenia resistente y desórdenes psicóticos severos; la literatura recoge efectos superiores sobre los síntomas positivos y negativos frente a otros antipiscóticos. Además, las tasas de recaída en la esquizofrenia resistente y no resistente al tratamiento en comparación con los antipsicóticos de primera generación y estos en combinación con antipsicóticos de segunda generación son menores. Asimismo, posee un efecto incisivo en el riesgo suicida y la agresividad mayor que otros antipsicótico, y su coste beneficio es mayor . A pesar de esto, el uso de este fármaco se ha visto limitado debido a sus potenciales reacciones adversas graves y potencialmente mortales, como la agranulocitosis, y por la necesidad de monitorización sistemática y vigilancia de los pacientes durante el tratamiento, que causa mayor incomodidad al propio paciente y genera un aumento de los gastos para el sistema sanitario.
Reintroducción de clozapina tras efectos adversos
Carolina García González et. al
Fecha Publicación: 20/05/2024
Depresión en Psicosis
Rosa Marina Brito Rey et. al
Fecha Publicación: 20/05/2024
El Trastorno Esquizo-Obsesivo.
Clara María Martín Gozalo et. al
Fecha Publicación: 20/05/2024
Uso de la clozapina según la carga poligénica del paciente para la esquizofrenia
Adamed Laboratorios
Fecha Publicación: 22/11/2023
Manejo Clínico del Rebote Colinérgico tras Retirada de Clozapina: A propósito de un caso.
Sara María Rivero Hernández et. al
Fecha Publicación: 18/05/2023
Clozapina en esquizofrenia de inicio muy temprano. A propósito de un caso.
ENCARNACION MUÑOZ DIAZ et. al
Fecha Publicación: 18/05/2023