Los trastornos psiquiátricos están asociados con un mayor riesgo de cardiopatía isquémica (DHI) y accidente cerebrovascular, pero no se sabe si las asociaciones o el papel de los factores sociodemográficos han cambiado con el tiempo.
El objetivo de este estudio es investigar la asociación entre los trastornos psiquiátricos, la DHI y el accidente ce...
Los trastornos psiquiátricos están asociados con un mayor riesgo de cardiopatía isquémica (DHI) y accidente cerebrovascular, pero no se sabe si las asociaciones o el papel de los factores sociodemográficos han cambiado con el tiempo.
El objetivo de este estudio es investigar la asociación entre los trastornos psiquiátricos, la DHI y el accidente cerebrovascular, por período de tiempo y factores sociodemográficos.
Utilizamos registros de población escoceses de 1991 a 2015 para crear cohortes retrospectivas con un registro hospitalario de trastornos psiquiátricos de interés (esquizofrenia, trastorno bipolar o depresión) o ningún registro de ingreso hospitalario por enfermedad mental. Estimamos la incidencia y los riesgos relativos de IHD y accidente cerebrovascular en personas con o sin trastornos psiquiátricos por año calendario, edad, sexo y nivel de privación basada en el área.
En todas las cohortes, la incidencia de DHI (645 393 eventos) y accidente cerebrovascular (276 073 eventos) disminuyó con el tiempo, pero los riesgos relativos disminuyeron solo para la depresión. En 2015, a la edad promedio al inicio del evento, los riesgos relativos fueron de 2 a 2. 5 veces mayores en personas con y sin un trastorno psiquiátrico. La edad en la incidencia del resultado difirió según la cohorte, el género y el estado socioeconómico. Los riesgos relativos pero no absolutos fueron generalmente mayores en mujeres que en hombres. El aumento de la privación conlleva un mayor riesgo absoluto de DHI para las personas con trastorno bipolar o depresión.
A pesar de la disminución en las tasas absolutas de DHI y accidente cerebrovascular, los riesgos relativos siguen siendo altos en aquellos con trastornos psiquiátricos versus sin ellos. Es posible que los enfoques de monitoreo y prevención de enfermedades cardiovasculares deban adaptarse al desorden psiquiátrico y el resultado cardiovascular, y dirigirse, por ejemplo, a la edad y al nivel de privación.
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