Esta investigación proporciona un análisis detallado y longitudinal sobre cómo diversos recursos psicológicos (PR) pueden influir y modificar el bienestar y el malestar psicológico durante períodos de crisis, utilizando como caso de estudio el primer año de la pandemia de COVID-19.
A lo largo de este periodo crítico, se estudió una mu...
Esta investigación proporciona un análisis detallado y longitudinal sobre cómo diversos recursos psicológicos (PR) pueden influir y modificar el bienestar y el malestar psicológico durante períodos de crisis, utilizando como caso de estudio el primer año de la pandemia de COVID-19.
A lo largo de este periodo crítico, se estudió una muestra de 481 participantes, quienes informaron en dos ocasiones, en abril de 2020 y junio de 2021, sus niveles de PR, malestar psicológico y bienestar. Estos PR incluían variables como el optimismo, la esperanza, la gratitud, la sabiduría y la flexibilidad psicológica, entre otros.
El análisis utilizado fue el panel de retardo cruzado, que permitió explorar las asociaciones a lo largo de un año entre estos PR y diversas formas de bienestar (hedónico, eudaimónico, social e interior) y malestar psicológico (especificadamente, síntomas de depresión y ansiedad). Los resultados indicaron que los PR no solo tienen un efecto protector ante el malestar psicológico, sino que también promueven diferentes formas de bienestar. Sin embargo, lo notable del estudio es la observación de que estos efectos son diferenciados; es decir, cada PR contribuye de manera única a estos resultados.
Entre los hallazgos más destacados se encuentra el papel de la flexibilidad psicológica, que emergió como el predictor más fuerte de todos los dominios evaluados. Esto sugiere que la capacidad de adaptarse y ajustar el pensamiento y comportamiento ante situaciones adversas puede ser especialmente crucial durante períodos de crisis. Además, los resultados mostraron que los PR se refuerzan mutuamente, lo que indica que el desarrollo o fortalecimiento de un recurso puede potenciar otros.
También es relevante señalar que, aunque en menor medida, el bienestar y el bajo malestar psicológico contribuyen a su vez al fortalecimiento de los PR. Esto sugiere un ciclo de retroalimentación positiva donde el bienestar y los PR se potencian mutuamente.
Este estudio subraya la importancia de considerar múltiples recursos psicológicos en la investigación futura, especialmente en contextos de crisis, para entender mejor cómo estos recursos interactúan y afectan la salud mental y el bienestar. Los hallazgos también apoyan la implementación de intervenciones psicológicas que promuevan el desarrollo de una gama más amplia de PR para ayudar a las personas a manejar mejor el estrés y mejorar su calidad de vida durante y después de períodos de crisis. La evidencia sugiere que fortalecer estos recursos puede tener un impacto significativo y duradero en la capacidad de las personas para enfrentar desafíos futuros, resaltando el valor de estrategias preventivas y proactivas en la salud mental.
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