El síndrome de abstinencia neonatal se describe como un conjunto de problemas que padece el bebe al nacer, causados por la exposición en el útero materno a drogas u otros fármacos delicados que la madre consumía durante el periodo del embarazo.
Hoy en día, se le está dando mucha importancia a los efectos de distintos fármacos durante el embarazo, en el futuro desarrollo del feto y las posibles patologías que se pueden asociar.
En la revista Psychological Medicine se ha publicado un estudio que explora la asociación potencial entre el tratamiento antidepresivo materno y el síndrome de abstinencia
en recién nacidos, e investiga la notificación comparativa entre subgrupos de antidepresivos, así como entre agentes individuales.
Los medicamentos antidepresivos principales que se utilizan como tratamiento farmacológico más común, son los inhibidores selectivos de serotonina (ISRS).
Su funcionamiento consiste en que después de llevar un mensaje, las células nerviosas reabsorben la serotonina (lo que se conoce como "recaptación"). Los ISRS funcionan bloqueando ("inhibiendo") la recaptación, lo que significa que hay más serotonina disponible para pasar más mensajes entre las células nerviosas cercanas.
El estudio, se centra en analizar un total de 102 ISRS administrados a la madre embarazada, asociados al desarrollo del síndrome fetal de abstinencia neonatal. Los análisis concluyeron que los principales fármacos que producen una asociación son cuatro; paroxetina, fluoxetina, sertralina y citalopram.
Además, los hallazgos implicaron una mayor desproporcionalidad de la paroxetina en comparación con los otros tres ISRS, posiblemente relacionada con su alta afinidad por los receptores muscarínicos, lo que puede aumentar el riesgo de síndrome de abstinencia colinérgico, y su vida media corta puede aumentar el riesgo de un síntoma de abstinencia.
Los resultados fueron que un total de 406 informes de síndrome de abstinencia neonatal, había 379 relacionados con antidepresivos administrados durante el embarazo.
La media de duración de los tratamientos antidepresivos maternales era de 36, 7 semanas (considerando que a partir de más de 36 semanas podía tener grandes riesgos en el feto) y los neonatos desarrollaban los síntomas entre el día 1-27 post-parto.
Los síntomas más frecuentes reportados fueron respiratorios (26, 11 %), irritabilidad/agitación (18, 47 %), temblor (12, 81 %), problemas de alimentación (9, 85%) y convulsiones (8 13%).
Este tipo de estudios son muy importantes, ya que es necesario saber todos los posibles riesgos que conllevan los fármacos, y sobre todo durante el embarazo, ya que es una etapa crucial en el desarrollo fetal y se pueden producir muchas anomalías. Como se produce en este estudio, que se ve una clara correlación entre las mujeres embarazas medicadas con ISRS, en concreto con los 4 fármacos que hemos comentado, y los neonatos que nacen y desarrollan el síndrome de abstinencia.
Por tanto, asesorar bien a los pacientes, en este caso las embarazadas, sobre las características clínicas que conlleva tomar un medicamento, la farmacodinámica y la farmacocinética es crucial para evitar el desarrollo de patologías posteriores.
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