Obtener comentarios sobre las tareas es una experiencia educativa omnipresente. Los investigadores generalmente han descrito el proceso de retroalimentación en una de dos formas: retroalimentación como transmisión de información de una persona más informada al alumno o retroalimentación como un diálogo centrado en el estudiante.
El presente estudio...
Obtener comentarios sobre las tareas es una experiencia educativa omnipresente. Los investigadores generalmente han descrito el proceso de retroalimentación en una de dos formas: retroalimentación como transmisión de información de una persona más informada al alumno o retroalimentación como un diálogo centrado en el estudiante.
El presente estudio destaca una brecha entre la teoría y la práctica al comparar las percepciones de los estudiantes universitarios sobre el propósito y el contenido preferido de la retroalimentación con las opiniones de los académicos.
Para medir las percepciones y preferencias de los estudiantes sobre la retroalimentación, administramos una encuesta a 80 estudiantes universitarios de una gran universidad de investigación en los Estados Unidos. También analizamos el contenido de la retroalimentación genuina que un subconjunto de esos estudiantes recibió como parte de una de sus tareas de clase auténticas.
En general, los resultados sugieren una comprensión compartida del propósito de la retroalimentación entre estudiantes y académicos. Sin embargo, los estudiantes no necesariamente desean recibir comentarios que reflejen esos propósitos.
Se discuten las implicaciones teóricas y prácticas de este desajuste entre los puntos de vista de los estudiantes sobre el propósito de la retroalimentación y sus experiencias reales con la retroalimentación.
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