Cómo un fármaco similar a la psilocibina afecta la depresión posparto.

Ensayo clínico pionero: psicodélicos contra la depresión posparto

Maci Philitas describió la experiencia como si estuviera buceando en un océano profundo. En su visión, halló un cofre con fotografías familiares: recuerdos de su boda, de sus padres e hijos, imágenes que simbolizaban amor, unión y continuidad. Aunque en su imaginación las guardó bajo el agua “a salvo”, en la realidad se encontraba tumbada en un sillón del Centro de Medicina Psicodélica de la NYU Langone Health en Manhattan, con un antifaz cubriéndole los ojos y personal sanitario controlando sus constantes vitales.

Philitas participaba en un ensayo clínico con psicodélicos para tratar la depresión posparto, convirtiéndose en una de las 84 mujeres en EE. UU. en sumarse a esta investigación. El estudio es doble ciego, es decir, las participantes no saben si recibieron la dosis completa o un placebo.
En su caso, tras más de un año de sufrir una depresión severa después del nacimiento de su segundo hijo, la mejora fue casi inmediata. “Es la primera vez en casi una década que me siento yo misma”, relató.

Los resultados, presentados esta semana, suponen un avance sin precedentes en dos áreas poco exploradas: la salud de la mujer y el uso terapéutico de psicodélicos. Si los datos siguen confirmándose, podría ser el primer tratamiento con aprobación federal en EE. UU. para la depresión posparto basado en esta vía innovadora.
Más allá de los testimonios individuales, el ensayo apunta a que la terapia asistida con psicodélicos podría convertirse en una herramienta eficaz y rápida frente a un trastorno que afecta a millones de madres y que hasta ahora ha contado con recursos terapéuticos limitados y, en muchos casos, lentos en su efectividad.

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