CARTAGENA (MURCIA), 1 Ago. (EUROPA PRESS) -
La Fundación Séneca ha reconocido la excelencia de un nuevo grupo de investigación de la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT), el de Diseño electrónico y técnicas de tratamiento de señal, que va a desarrollar durante los próximos años un proyecto sobre tecnologías emocionales, "una frontera del conocimiento", según lo describe José Manuel Ferrández, investigador principal.
"Hasta ahora habíamos basado la relación entre los ordenadores y el ser humano en el nivel cognitivo del cerebro, no en las pulsiones emocionales que subyacen y que son tanto o más relevantes a la hora de tomar decisiones", argumenta.
"Las tecnologías emocionales comenzaron a impulsarse en 2010 y actualmente su impacto económico se cifra en 9.000 millones de euros, pero se espera que aumente a 42.000 millones en 2020", señala el también vicerrector de Internacionalización de la Politécnica, según informaron fuentes de la UPCT en un comunicado.
Entre las líneas de investigación que se van a desarrollar se encuentran la robótica social, para que los robots puedan interpretar las emociones del usuarios e intentar mejorar su estado de ánimo o alertar en caso de situaciones críticas, y la inteligencia ambiental, para que "el propio domicilio del individuo detecte, a través de sensores no intrusivos los patrones de conducta, el estado emocional de la persona", explica el co-investigador principal, Ramón Ruiz, quien ya participó en el desarrollo electrónico de nodos de sensores para la monitorización de viviendas de personas mayores.
Otra de las tecnologías en las que trabajarán estos investigadores de la Politécnica, denominada Brain-Computer Interface (BCI) Emocional, busca observar los patrones de activación cerebral para permitir al usuario interactuar con el ordenador o activar sistemas de movilidad. "También se está utilizando en neuromarketing para identificar las emociones que procesa el sistema límbico", indica Ferrandez. "Las emociones no mienten", añade.
La detección de emociones a través del habla es otra de las líneas de investigación, con aplicación en el hallazgo temprano de principios de enfermedades neuronales como el Parkinson o el Alzhéimer. También de utilidad sanitaria sería la quinta vía de desarrollo del proyecto, para trabajar en neuroprótesis de estimulación profunda del cerebro para el tratamiento eléctrico de pacientes con trastornos emocionales.
"El proyecto es muy ambicioso y buscaremos la colaboración internacional de otros grupos de investigación para dar respuesta a estas necesidades sociales", remarca Ferrández. La Fundación Séneca, agencia de Ciencia y Tecnología de la Región de Murcia, ha concedido financiación para otros cuatro grupos de la Politécnica de Cartagena en su última convocatoria de Ayudas a los Grupos y Unidades de Excelencia Científica.
El grupo de Diseño electrónico y técnicas de tratamiento de señal lo conforman 14 investigadores y cuenta también con la colaboración externa de expertos como Pedro Gómez Vilda, Eduardo Fernández y el honoris causa de la Politécnica de Cartagena Rafael Rebolo. "Somos un grupo heterogéneo y multidisciplinar", destaca Ruiz. El grupo también participa en proyectos de sistemas de procesado de visión y de instrumentación astrofísica, colaborando con la Agencia Espacial Europea.