Los efectos positivos y negativos de interactuar con contenido basado en la web sobre la salud mental y, especialmente, sobre las autolesiones, están bien documentados.
Las historias de experiencias vividas son uno de esos tipos de contenido estático basado en la web, que se publican con frecuencia en sitios web de organizaciones de
El sector sanitario o del tercer sector, as&iacut...
Los efectos positivos y negativos de interactuar con contenido basado en la web sobre la salud mental y, especialmente, sobre las autolesiones, están bien documentados.
Las historias de experiencias vividas son uno de esos tipos de contenido estático basado en la web, que se publican con frecuencia en sitios web de organizaciones de
El sector sanitario o del tercer sector, así como en redes sociales y blogs, como una forma de apoyo para quienes buscan ayuda a través de la web.
Objetivo
Este estudio tuvo como objetivo aumentar la comprensión sobre cómo las personas que se autolesionan interactúan y evalúan las historias de experiencias vividas basadas en la web.
Métodos
En general, se realizaron 4 grupos de enfoque basados en la web con 13 personas con experiencia reciente en autolesiones (de 16 a 40 años de edad). En total, se leyeron en voz alta 3 ejemplos de historias de experiencias vividas a los participantes, a quienes luego se les pidió que compartieran sus reacciones a las historias.
También se animó a los participantes a reflexionar sobre las historias encontradas previamente en la web. Los datos fueron analizados temáticamente.
Resultados
En general, se generaron 5 temas: historias de recuperación de autolesiones y su impacto emocional, impacto en las conductas de autoayuda y búsqueda de ayuda, identificación con el narrador, autenticidad y lenguaje y estereotipos.
Conclusiones
Las historias de experiencias vividas publicadas en la web pueden proporcionar una valiosa forma de apoyo para quienes se autolesionan. Pueden ser motivadores y empoderadores para el lector, y tienen el potencial de distraer a los lectores de los impulsos de autolesionarse. Sin embargo, estos efectos pueden ser moderados por la edad y las narraciones de recuperación pueden desmoralizar a los lectores mayores.
Nuestros hallazgos tienen implicaciones para las organizaciones que publican contenido de experiencias vividas y para las pautas de la comunidad y los moderadores de foros basados en la web en los que los usuarios comparten sus historias. Estos incluyen la necesidad de considerar la edad del narrador y la relación y autenticidad de su viaje y la necesidad de evitar el uso de un lenguaje estigmatizante.
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