Enrique Rojas, catedrático de Psiquiatría de la Universidad, destaca que la psiquiatría ha pasado al ámbito de la calle y que hay que conocer los avances en psicofármacos. Además, describe cómo alcanzar la felicidad.
La felicidad sigue siendo la vocación universal del ser humano. En el público estaban, entre otros, Ángel Luis Rodríguez de la Cuerda, secretario general de la Asociación Española de Medicamentos Genéricos (AESEG), y los exministros Fátima Báñez, Rafel Catalá y José Manuel Soria. Este lunes, la tribuna Foro Salud, acto organizado en el Casino Gran Círculo de Madrid por Nueva Economía Fórum bajo el mecenazgo de Bidafarma, fue para Enrique Rojas, catedrático de Psiquiatría de la Universidad de Extremadura en excedencia.
Ana Pastor, presidenta del Congreso de los Diputados, lo presentó. Aseguró que pocos especialistas conocen el comportamiento humano como él. "Es uno de los psiquiatras más prestigiosos del mundo", declaró. Rojas remarcó que los médicos que más han crecido en el mundo son los psiquiatras y los cirujanos estéticos. Adelantó que iba a dar cinco consejos para alcanzar la felicidad, para llevar a los presentes a un terreno concreto.
Primero, definió qué es la felicidad. "Se puede ver desde la temporalidad, en relación con los bienes terrenales y psicológicos", apuntó. Expuso que, según Sócrates, es encontrase a uno mismo. Según Platón, está relacionada con el amor. Según Aristóteles, consiste en el bien. Según Séneca, consiste en la virtud. "En la medida en que practicas la virtud, eres más feliz", matizó. Por el contrario, Epicuro nos dice que la felicidad consiste en el placer. Para San Agustín, es la alegría en el bien. Kant considera que está más en la imaginación que en la realidad. Por eso, Rojas recomienda a sus pacientes una "visión larga en la jugada". La felicidad se encuentra en muchos ámbitos.
El primer consejo que brindó fue que hay que "superar las heridas del pasado". El aprendizaje de todos nosotros tiene que ver con el pasado, de tomar notas con lo que nos ha ocurrido. "La medida consiste en tener buena salud y mala memoria. La persona que queda atrapada en esos recuerdos se convierte en neurótica. Se convierte en una persona resentida y echada a perder. Nosotros hacemos la cirugía estética del pasado", precisó. Es el perdónate a ti mismo.
El segundo consejo para ser feliz fue "tener una visión positiva de las cosas". De acuerdo con sus palabras, hay derrotas que se convierten en victorias con el pasado de los tiempos. "Lo que te ayuda a crecer como persona son los fracasos, son los errores. He visto a gente que ha empezado a triunfar muy pronto y ha sido el destrozo total", señaló. Es la capacidad para crecer uno ante las adversidades.
El tercer consejo fue "tener una voluntad de hierro". Aquí habló de la terapia integral, de la medicación necesaria, de la psicoterapia, de la socioterapia. Así, "la voluntad es la capacidad para ponerte objetivos concretos medibles". Sostuvo que la mejor manera de fomentar la voluntad es con una especie de tabla, de ejercicios, de voluntad. Es decir, "la costumbre de vencerme en lo pequeño". "Si tienes voluntad, los sueños se hacen realidad", manifestó.
El cuarto consejo fue "una buena ecuación entre corazón y cabeza". Aseveró que una persona feliz es aquella que es capaz de convidar a la vez corazón y cabeza. Recordó que se ha puesto de moda el concepto de inteligencia emocional, que "es la capacidad para mezclar con arte y oficio los instrumentos de la inteligencia y la afectividad".
Por último, el quinto consejo fue "tener un proyecto de vida". O sea, un programa personal en amor, en trabajo, en cultura y en amistad. "No hay felicidad sin amor", advirtió. El amor humano es una tarea, es un trabajo. "Y no hay amor sin cultura", añadió. Hizo hincapié en el amor por el trabajo bien hecho. Comentó que la amistad es donación, confidencia e intimidad.
En el turno de preguntas, se abordaron diferentes cuestiones. Indicó que, en España, hay cuatro millones de depresivos. Las dos bajas principales en psiquiatría son causadas por la ansiedad y por la depresión. "Hay que enseñar que la felicidad es la suma con lo que he hecho con mi proyecto de vida", expresó. Informó de que hay mucho intento de suicidio por paro juvenil. "Uno de los temas que más preocupan es el paro. El psiquiatra hoy es un médico cercano. La psiquiatría es una rama de la amistad", alegó. Insistió en que la depresión clínica es una enfermedad gravísima y en que se utiliza muchas veces la palabra depresión a la ligera.
Rojas comunicó que las dos adicciones más frecuentes actualmente en la gente joven, de 18 años a 30 años, son las adicciones al móvil y a las redes sociales y la adicción a la pornografía. Es fundamental la utilización inteligente del móvil. Tres pilares para ser feliz son vivir honestamente, no dañar a nadie y dar a cada uno lo suyo. "La lectura es a la cultura lo que el ejercicio físico al cuerpo", recalcó. Propuso llevar a cabo esta actividad apagando Internet, desconectando de las redes sociales.
Como este lunes era el 15 aniversario de los atentados del 11M, le preguntaron si era positivo o no recordar con homenajes estos hechos. "Es importante recordarlo. Es fundamental tener las ideas claras", contestó. Aseguró que, aunque estamos bombardeados de noticias negativas, hay muchas cosas buenas en el mundo.
¿Hay sobrediagnósticos? A su parecer, "la psiquiatría ha pasado al ámbito de la calle". "Hay que saber los avances que se han producido en psicofármacos. Los avances médicos son fundamentales", pronunció. Pidió distinguir entre depresiones y "tristezas de la vida". Contó que muchas veces queremos corregir problemas psicológicos con farmacoterapia. Mencionó la Ketamina como un nuevo antidepresivo, que aún no está en España, y que daría muy buenos resultados.
Por otro lado, cuestionó los centros de educación especial y se mostró a favor de que los colegios eduquen de forma inclusiva a niños con discapacidad.
Para pasar de un mundo líquido a uno sólido, lo más importante es "tener las ideas claras". ¿Quién soy yo? ¿A dónde voy? ¿Con quién? La conclusión de Rojas es que "deberían encerrarnos en la felicidad y no encontrar la llave".