Nueva investigación indica que la combinación de tres factores cruciales está detrás de una amplia gama de trastornos psiquiátricos diferentes.
Un estudio publicado en Neuropsychopharmacology plantea la posibilidad de que una combinación de rasgos temperamentales, adversidad en la infancia y una transmisión de dopamina mal regulada aumentan el riesgo de padecer diversos trastornos psiquiátricos de aparición temprana, comúnmente comórbidas, como depresión, ansiedad, adicción y trastornos de la conducta alimentaria.
El estudio longitudinal se llevó a cabo en jóvenes a los que se efectuó seguimiento desde su nacimiento. A los 18 años, 52 participantes se sometieron a una tomografía por emisión de positrones (PET), completaron el Cuestionario de Trauma Infantil y fueron evaluados con la Entrevista Clínica Estructurada del DSM-5.
El modelo de tres factores identificó a aquellos con un antecedente de trastornos del DSM-5 en el curso de la vida con una precisión global del 90,4% y explicó el 91,5 % del área bajo la curva de precisión diagnóstica.
El modelo se mantuvo significativo cuando se incluyeron los datos de participantes que desarrollaron sus primeros trastornos durante un periodo de seguimiento de tres años.
"Hasta hace poco, se creía que los trastornos psiquiátricos reflejaban entidades nosológicas definidas, cada una con sus propias causas", explicó el autor principal Marco Leyton, de la Universidad McGill de Canadá. "La presente investigación pone en entredicho esta idea, y parece indicar que la mayoría de los trastornos de aparición temprana reflejan en gran medida expresiones diferenciales de un pequeño número de factores biológicos, psicológicos y sociales".
