El apoyo social confiable y constante está asociado con la salud mental y el bienestar de las personas con enfermedades mentales graves, incluido el trastorno bipolar (TB).
Sin embargo, la pandemia de COVID-19 y las medidas de distanciamiento social asociadas (por ejemplo, el confinamiento) redujeron el acceso a contactos sociales habituales, mientras que el uso de las redes sociales aumen...
El apoyo social confiable y constante está asociado con la salud mental y el bienestar de las personas con enfermedades mentales graves, incluido el trastorno bipolar (TB).
Sin embargo, la pandemia de COVID-19 y las medidas de distanciamiento social asociadas (por ejemplo, el confinamiento) redujeron el acceso a contactos sociales habituales, mientras que el uso de las redes sociales aumentó al mismo tiempo.
Objetivo
Para este estudio, teníamos dos objetivos.
Primero, brindamos información descriptiva sobre el uso de redes sociales (SMU) por parte de personas con TB durante COVID-19 (todas las plataformas), específicamente para Facebook.
A continuación desarrollamos y probamos un modelo hipotético para identificar asociaciones directas e indirectas entre los síntomas de BD, el apoyo social, la soledad, la satisfacción con la vida y el uso de las redes sociales.
Las respuestas se recopilaron durante la propagación global de la variante Delta y antes/concurrentemente con la variante Omicron, 20 meses después de que la Organización Mundial de la Salud declarara al COVID-19 una pandemia global.
Métodos
Durante ocho semanas, los participantes fueron reclutados utilizando publicidad en redes sociales microdirigida a adultos con TB. En promedio, los participantes tenían 53, 96 años de edad ( DE = 13, 22, rango 20-77 años), habían completado 15, 40 años de educación ( DE = 4, 28) y fueron diagnosticados con TB hace 19, 60 años ( DE = 10, 31). Se realizó un análisis de ruta para desarrollar y probar nuestro modelo hipotético.
Resultados
Casi todos los participantes (93%) informaron tener cuentas de Facebook y LinkedIn; El 91, 1% informó el uso regular de uno o ambos.
Durante la pandemia, la mayoría (60, 8%) informó haber accedido a las redes sociales varias veces al día; El 36% informó haber usado las redes sociales con más frecuencia desde la aparición de COVID-19.
Específicamente para Facebook, el modelo que planteamos como hipótesis difería un poco del que surgió. El modelo resultante sugiere que los síntomas de depresión predicen la soledad e inversamente, el apoyo social y la satisfacción con la vida.
El apoyo social predice el uso social de Facebook, mientras que el uso pasivo de Facebook predice la satisfacción con la vida. Los síntomas de depresión surgieron como predictores indirectos de SMU a través del apoyo social.
Conclusiones
Nuestros hallazgos sugieren que la definición operativa de SMU pasiva-activa requiere un mayor análisis y refinamiento. En contraste con la teoría, el uso pasivo de Facebook parece correlacionado positivamente con el bienestar entre determinadas poblaciones. Se requiere una recopilación de datos longitudinales en múltiples puntos para identificar asociaciones entre los síntomas de BD, el uso de las redes sociales y el bienestar a lo largo del tiempo.
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